Una mujer natural

CAPITULO 1

Viajar a otro país, dejar de lamentar no haber hecho algo importante en mi vida y tener amigos. La lista de cosas aun por tachar de mi libreta. <<Que se supone que deba tachar primero?>> me lo pregunte a mi misma mientras me rascaba la nuca. <<Debería poner más en la lista>> Me dije mientras seguía caminando con la mirada hacia el suelo, aunque se me paso por la cabeza una vez, el que ocurriría si yo ya hubiera tachado las cosas de la lista. El hacer algo importante, tener amigos y largarme de este estúpido país.

Desde los 11 lamente no haber hecho algo que tenga importancia y efecto en mi vida y que sea productivo, a partir de los 15 lo único que hice fue preocuparme por mi misma, fijarme en la paga del departamento, gastos y la fabulosa ida a la escuela, y me he preguntado << Realmente estoy viviendo al máximo mi vida de adolescente?>>.

Después de cuestionarme durante el camino a la escuela, me fije en que desgraciadamente había llegado. 

  -Buenos días escuela, aburrimiento.- Dije en voz baja-

Fijé mi mirada en un folleto de uno de los postes que decía <<Departamentos en renta 0-1-x-x-x-x. Llame aquí!>> Gracias a mi gran interés en largarme de aquí aunque no sea fuera del país tome uno de los varios numeritos que había en la parte de abajo. Seguí mi camino hasta llegar a mi salón para después ir a mi lugar, sentarme y sacar mi cuaderno. Tomé mi pluma y comencé a hacer garabatos de todo tipo, hasta que uno formara la figura de...

  -Un viejo? - Dije extrañada.

  -Hola a ti también señorita Anderson.- Dijo el profesor poniendo su mano en mi pupitre con una sonrisa.

-Ah, lo siento. - Dije por lo bajo.

Es una de las razones por las que no me gusta hablar en voz alta, cada vez que digo algo, mi linda suerte juega sucio y me deja en ridículo.

  -Buenos días alumnos, antes que nada recordarles que las vacaciones están a la vuelta de la esquina y esta semana es total y puramente de exámenes y repaso. - Dijo con una sonrisa en su cara.

  -Señor Patrick! - Una de las chicas del fondo levanto la mano después de hablar - Eso significa que es hora libre? - Se levantó.

  -Así es. - Dijo pasando su mano por su escritorio - Así que no defrauden a su profesor favorito y comiencen a estudiar chicos, Okey? - Termino sentándose.

<< Y quién dijo?>> Pensé mientras ponía mi mano en mi barbilla y suspiraba. No era lo mejor pero por lo menos me podía dar el lujo de no escuchar Las historias del Señor Patrick. Todos se pusieron en mesas de 4 o 5 integrantes, platicando a todo volumen y diciendo tonterías, no soy o seria muy diferente a ellos, el problema es no tengo con quién, y lo peor es que me tienen tachada por mi aspecto y mi "actitud" ya que como mencione, la suerte me juega sucio para hacerme quedar en ridículo o en mala posición. En el mismo momento en que alguien decide preguntar o hablarme sobre cualquier cosa lo hacen en el peor momento, dejándome como el juego de cartas, solitario. Quedando como Lony Anderson delincuente, que esta totalmente sacado de contexto, puede que no sea la mejor comunicándome o este en la mejor posición, pero eso no quita el hecho de que me guste interactuar. 

Parece que el "No juzgues a un libro por su portada" terminó. Hasta que alguien quiera hablar...

  -Anderson! - Dijo alguien mientras se posaba en mi escritorio.

  -Mhhm?. - Conteste a lo normal.

-Dime, saldrías conmigo? pareces no muy sociable y difícil, pero eso me gusta. - Dijo entusiasmado.

   -Disculpa? - Dije extrañada mientras levantaba una ceja.

   -Eh, no? entonces, que te parece mi amiga? soy una buen candidato para novio y amigo, aun que tengo pros y contras, te gustará estar conmigo, siempre quise un amigo o amiga introvertido. - Contesto de manera relajada y alegre.

  -Que? pros? contras? - Pregunte extrañada por su tipo de comportamiento hacia mi.

  -Déjame presentarme! Soy Zack, Zack Willson, ya sabes como la marca, pero en vez de una ele son dos. -Dijo mientras hacia un intento de guiño fallando en el intento.

  -Ajá... no me tengo que presentar supongo, ya que sabes mi apellido. Prácticamente lo gritaste. - Trate de no sonar sarcástica, pero creo que salió por costumbre.

  -Si, tu nombre es Lony y tu apellido Anderson. Ah! no eres hija por casualidad de Edd Anderson? el dueño de Brand Anima? - Preguntó curioso.

  -Debo de contestar eso, o lo puedo pasar? - Dije incomoda mientras empezaba a guardar mis cosas.

  -Mientras me contestes la primera pregunta, si. - Dijo confiado.

  -Ok, adiós! - Termine diciendo para levantarme.

  -Eh, espera! - grito justo al momento en que sonó el timbre para la siguiente clase- Entonces lo tomare como un si! - volvió a gritar.

  -Como quieras! Nos vemos Zack Willson. - Dije para después irme.

Comencé a caminar lo mas tranquila posible hasta llegar al salón de Filosofía y dejar mi mochila en uno de los pupitres, para después salir corriendo a los baños. <<SUERTE NO VOLVERE A HABLAR MAL DE TI!>> grite dentro de mi, me impresiono el que alguien como el que no destaca mucho pero se ve que es confiado y optimista se haya fijado en mí, ¡La mejor opción para un amigo! oh pero no como novio, no gracias. 

Mi alegría seguía al borde hasta que a mi pie se le ocurrió resbalar en una de las vueltas. Termine tirada en el suelo, mientras que los demás fijaban su atención a mi.

   -Nunca me vuelvo a fiar de ti. - dije intentando levantarme.

Con la cara totalmente roja me levante, y pose mi mirada en una de las personas que había presenciado mi caída.

-Anderson, se encuentra bien? - Dijo el profesor Patrick mientras me miraba con preocupación.

<<Magnifico! ya son 2 veces en el día>> Pensé mientras bajaba mi cabeza, no seria la primera vez que pasaba vergüenza frente el profesor Patrick, tomando en cuenta que es amigo de mi familia y es mi vecino. Aunque no daría una buena imagen si lo dijera uno de los dos, una estudiante y un profesor son vecinos. Puede ser uno de los mejores profesor pero es joven, eso causa que alumnas y maestras le coqueteen, aunque me suena a algo inmaduro, sería peor si alguien supiera que somos vecinos.

-Estoy bien gracias, en un rato se pasara el dolor. - dije mientras sobaba mi cadera.

-Segura? quieres ir a la enfermería por si acaso? - Pregunto preocupado.

-No se preocupe, estoy bien. -conteste mientras que me estiraba exageradamente - Ve?

-jajaja ya veo, si acaso y llegas a casa y te sigue doliendo dime, no hay nada que un químico no pueda resolver! - dijo poniendo sus manos en su cadera.

-Si gracias, iré si sigue doliendo. - Dije riendo.

Seguí caminando pero ahora volvía a mi salón. <<Es triste el hecho de que mi profesor de química sea mi mejor amigo>> pensé mientras me sobaba mi codo por el golpe. No era lo mejor, pero al menos el podía estar ahí cuando lo necesitaba, como un hermano. 

Intente caminar un poco mas rápido mientras pensaba en alguna excusa por llegar tarde a la clase, el profesor Héctor no era muy permisivo en tanto faltas o llegadas tarde a clase. Me apresure lo mas que pude para querer llegar a el salón. Justo al llegar a la puerta del salón, la abrí, tomando mi brazo de manera exagerada fingiendo dolor.

-Perdón la tardanza, tuve un accidente. -Dije mientras entraba.

No fue la mejor mañana, pero podría estar peor.

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