Lore Update

La Jungla

Lo primero que vi y sentí fue una estática, parecía venir de todos lados y al mismo tiempo de ninguno y parecía estar observándome, como si me estuviera intentando hablar, hable para preguntarle que quería solo para darme cuenta de que mi voz también formaba parte de la estática, sentí que me llamaba, que se hacia mas grande y mas fuerte, sentí mi cuerpo volverse parte de ella rápidamente, y justo cuando alcanzaba mis ojos, desperté.

Desperté de golpe y sobresaltada, la luz del sol me debería haber enceguecido pero era demasiado tenue, las hojas de los árboles de alrededor bloqueaban la luz casi por completo, aun así pude percibir que el sol debía haber salido hace poco, ¿Quizás eran algunas horas antes del mediodía? Estaba tirada en el suelo del lugar así que una vez que desperté bien me levanté y mire alrededor, ¿Donde estaba?

Sin duda era una jungla bastante frondosa y era vagamente familiar, pero no tenia el mas mínimo recuerdo de nada antes de ese... extraño sueño, ¿Como es que había terminado ahí? Tenia heridas en mis brazos, manos y piernas, o me las había hecho al venir o era inquieta al dormir, quizás un poco de ambas. Recordé cuando intente hablar en mi sueño, asustada decidí intentar otra vez y por suerte esta vez si fue mi voz, se me hizo raro escucharla por primera vez.

Escuche una especie de graznido, muy fuerte pero lejano, arriba mio, aunque no pude ver nada mi instinto tomó control y me apresure a buscar algún refugio, no parecía haber nada parecido cerca así que seguí caminando, la jungla debía estar llena de animales peligrosos y no quería quedarme mucho tiempo ahí, completamente sola, mientras caminaba sin dirección me di cuenta que no estaba acostumbrada a hacerlo, no podía poner mis piernas en piloto automático, como si no lo hubiera hecho en mucho tiempo.

A medida que seguía caminando y acostumbrándome a pisar aquel terreno traicionero, seguí revisándome a mi misma, rayos, ni siquiera recordaba como me veía, exploré mi cabello con mis manos, no se sentía correcto, lo tenia mas largo de lo que me parecía cómodo, de un lado mas que del otro y tenia bastantes nudos, mis manos bajaron por mi rostro, parece que tenia algunas heridas por ahí también, decidí dejar de hacer eso, no quería tocar más de mis heridas con mis manos llenas de tierra húmeda.

El tiempo pasó y pasó, con cada minuto me volvía mas paranoica, escuchaba ruidos en todas partes, sentía que me observaban y que había algo detrás de mi, pero cada vez que revise no encontré nada, por otra parte los ruidos que provenían del cielo eran muy reales, o eso quería creer hasta que algo me lo confirmó, una figura en el aire, pensé que era un ave muy grande, pero cuando la miré mejor me di cuenta que eso era imposible, era demasiada rápida y grande para eso, pero era bastante majestuosa aunque apenas pudiera apreciar sus detalles.

Empezaba a hacer bastante calor y sentía a mi cuerpo fatigarse, ya debía ser unas tres o más horas mas tarde del mediodía y estaba sudando, decidí sentarme en la base de un árbol a descansar un rato, había caminado por tanto tiempo y no había encontrado nada mas que árboles y mas árboles, hacia tanto calor que decidí quitarme la camiseta para refrescarme un poco, no me atrevía a tomar nada del lugar para comer a pesar de mi hambre, temiendo que me intoxicara.

Descanse durante varias horas, creo que incluso me quede dormida por un rato aunque no soñé nada esta vez, una vez que empezó a hacer menos calor me levante con mi camiseta al hombro y retomé el camino rápidamente, intentando ignorar mi hambre y mi fatiga todo lo que podía, no me dí cuenta de que la jungla había empezado a oscurecerse, pronto ya había anochecido, mi paranoia volvió mas fuerte que nunca, veía sombras moverse en todos lados y juraría que algo me había susurrado justo en mi nuca.

Pensé que quizás lo mejor seria buscar un refugio y dormir para seguir caminando en la mañana, descarté rápidamente esa idea al escuchar un abismal gruñido, seguido de varios otros gruñidos, busque donde esconderme pero lo único que encontré en la oscuridad fueron... no sabría describirlos, eran... se parecían hasta cierto punto a mi, tanto como un cerdo se parece a un jabalí, pero ellos estaban podridos, les faltaban extremidades y sus ojos estaban muertos, el pánico se apoderó de mi. 

Corrí como desquiciada en la dirección contraria de esas criaturas, escuche otro ruido mientras huía, era como... ¿Huesos? Antes de que supiera que pasó una flecha se clavó en mi hombro derecho, solté un grito de dolor, no se como me mantenía corriendo, para evitar que se clavara mas arranque la flecha de mi hombro con fuerza, soltando otro grito con lágrimas en mis ojos, no sabia si debía cubrir la herida con mi sucia mano o dejar que siguiera sangrando, opté por la segunda opción sin saber si era la mejor.

Seguí corriendo y corriendo, escuchaba las criaturas a mi espalda, persiguiéndome sin descanso, y sentía como mis fuerzas me abandonaban por el cansancio y la herida sangrante de flecha, con mi borrosa vista alcance a divisar unas luces, ¿Unas luces? ¿Que significaban? Fuera lo que fuese, era mejor que estar en la oscuridad así que corrí hacia ahí, cada vez mas lento, tropezándome bastante, mientras mas me acercaba empece a escuchar voces que no podía entender por ahora. Pronto me di cuenta de que parecía una aldea, los habitantes me divisaron y se acercaron cuando con mis ultimas fuerzas me acerque a la entrada.

Y entonces todo se volvió oscuro.