(2) ♱ La advertencia ♱.

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Después de lo de anoche, no pude dormir bien

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Después de lo de anoche, no pude dormir bien. La imagen de Anna muerta se venia a mi cabeza cada vez que cerraba los ojos, y si caía en un profundo sueño, soñaba con ella siendo atacada por sombras, en un estado de mutilación, , golpeada y muchas cosas más que no quiero recordar.

Me siento en el asiento que era de Anna, y me miro en el mismo espejo que la noche anterior ella se miró. Agarro un labial que reposaba sobre la pequeña mesita; un fuerte labial rojo sangre, mate. Comienzo a maquillarme con él sin dejar de pensar en lo sucedido.

Mi cabello oscuro caía en mis hombros, y mis ojos combinaban con mi campera de Jean azul marino, ojos que termino por ocultar tras unos lentes de contactos marrones.

Mientras me preparaba, me preguntaba qué hubiera pasado si hubiera dicho que sí al momento que Anna me ofreció ir con ella a la fiesta. ¿Habría hecho alguna diferencia? ¿O en este momento estaríamos muertas las dos?

Sin conseguir respuesta alguna, claramente. Me di cuenta que ya estaba llegando tarde. Me levanté de golpe y emprendí mi búsqueda del edificio en donde tomaría mi primera clase.

Por el hecho de que aún no estoy familiarizada con el campus, estoy perdida. Y mi primera clase es de literatura moderna.

—¿Dónde estará el edificio? —dije en susurros para mí misma

No pretendo ser la típica chica nueva que se termina perdiendo el primer día d clases. Mucho menos en este lugar.

—¿Nadie te dijo que el día de vestimenta libre son los viernes? —oigo la voz de una chica.

Me doy vuelta de inmediato y me encuentro con unos ojos color avellanas, de lentes y cabello rubio platino. La muchacha me recibió con una sonrisa y sus ojos se achinaron.

—Es que... no leí el folleto —digo, honestamente.

Realmente no lo creí necesario. A demás, ¿Quién diablo lee los folletos? Y a todo esto, cuando mi hermana cursaba aquí, no usaban uniforme. Aunque cabe aclarar que cuando mi hermana cursaba aquí era apenas una niña yo. Así que no lo recordaría teniendo en cuenta la memoria de corto plazo que suelo tener.

—Con la pinta que llevas de nerd es raro que no te lo hayas leído—contestó, arqueando las cejas—. Es broma —agregó, riendo —. Me llamo Luan, ¿Qué cursada estás buscando?

¿A todas se le dan por hacer malas bromas los primeros días? ¿Qué puta pasa con este lugar?

—Literatura moderna —afirmé

—¡Genial! ¡Ya tengo a mi hámster de este año! —suelta Luan, con entusiasmo.

Seguido de eso, coloca sus brazos en mis hombros y me doy cuenta de que quedo de estatura baja a comparación de ella.

—¿Hámster? —pregunté, confundida

Luan no contestó. Pero supuse que era algo así como una amiga. Eso creo...

Entre PecadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora