[En este libro se mencionara a Dios a veces, pero NO es una historia religiosa Por favor, no criticar ni hacer comentarios sarcásticos]
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Quién lo diria, no?
Amar duele y ella lo sabia.
El dia habia empezado bien. Flug la alimentó y la saco de su jaula- habitacion, se vistió, aniquiló herues y en su tiempo libre empezo acosar a su amado jefe, Black Hat.
Él estaba como siempre leyendo el periódico "Hat News" para saber de la desgracia de los demas. Ella podía trepar por las paderes y ver todo lo que hacia.
Llovía afuera, pero eso no pareció importarle. Black hat parecia no notar su presencia o al menos no le importaba que ella estuviera espiandolo
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De repente escuchó como alguien se acercaba y se escabullo para espiar la conversación
Flug: J-Jefesito?- ella no podia verlo, pero se imaginaba al cientifico asomandose por la puerta
Bh: Qué?
Flug: No ah visto a demencia? No la encuentro por ninguna parte
Bh: Mejor- suspiró- Asi no hace destrozos en la mansion y no se la pasa molestandome
Flug: La verdad me da miedo, ya que esa chiquilla puede hacer lo que sea
Bh: Parece que los castigos no le son suficientes
Demencia se sentia incomoda, ¿Acaso siempre hablaban mal de ella cuando no estaba presente? Por alguna razón eso la sorprendió, sabiendo como era Flug y Black Hat
Los dos hombres hablaron por un rato sobre ella hasta que oyó algo que le dolio en su alma
Bh: Por cierto- se oyó unos movimientos- Toma Flug .-se oyó como si le arrojara algo
Flug: Y esto?
Bh: Es uno de los tantos regalos inutiles que Demencia me dio- la chica abrio los ojos y se atrevio asomarce disimuladamente. Flug tenía el pequeño regalo que le habia dado a Black Hat esa mañana- No lo quiero. Desaste de él al igual que los otros
Demencia se tocó su pecho al sentir dolor. Su amado desechaba los regalos que con tanto esfuerzo ella le preparaba
Bh: Esa niña no entiende que NUNCA la amaré. Jamás amé a nadie y no lo haré con ella- hubo una pausa- Ella solo es otra de mis marionetas con las que me gusta jugar...
Demencia no terminó de oir la conversacion, sentia que se rompía y huyo de la situacion.
Black Hat sonrió al oirla alejarse. Esperaba que con eso ella lo dejara en paz
Demencia se fue corriendo sin rumbo alguno, no queria saber de nadie ni de nada
Llegó a un espacio donde solo habia arboles y se dispuso a llorar, gritar y lamentarse.
