El sol en la mañana había comenzado a asomarse desde el horizonte. En el jardín trasero de la finca Sartre se ubicaba un pequeño espacio similar a un dojo japonés pero con tendencias europeas, en el interior había todo tipo de maquinas para practicar deportes desde raquetas de tenis hasta ballestas para prácticas.
Como era usual en la finca Sartre todos los días desde antes de que el sol comenzará a brillar hasta la usual hora para asistir a la escuela un joven de cabellos castaños y anteojos se ubicaba en un extremo del dojo con un largo arco olimpico.
La concentración del joven era tal que solo su respiración podía ser escuchada dentro del dojo, la flecha de negra estaba totalmente tensada mientras la punta de aquella flecha brillaba en silencio.
"Sizz"
Pronto los dedos del joven dejaron libre la cola de la flecha permitiendo que ésta obtuviera finalmente la libertad para cruzar todo el dojo hasta impactar en el centro de la diana.
"¡Si!" el joven celebró con emoción al ver el resultado de su tiro, la flecha recorre la inmensa cantidad de doscientos metros "Hoy parece ser un buen dia"
"Francis el desayuno esta listo, ven antes de que mamá se enfade"
"En un momento, tengo que guardar el arco antes de salir" Francis simplemente bajo su arco y arreglo su cabello antes de quitar el sudor acumulado en la frente
La finca Sartre desde tiempos inmemorables perteneció a la prestigiosa familia que conllevaba el mismo nombre, es decir a la familia Sartre que por consiguiente significaba ser una familia de antigua nobleza es decir una familia de prestigio político.
Francis es un joven delgado pero con músculos en todo su cuerpo ganados gracias a la práctica de diversos deportes. Debido a la degeneración la familiar, Francis se ve en la obligación de usar anteojos pero gracias a la forma de su cara podría decirse que son perfectos en su apariencia haciendo que este se vea incluso mejor, Francis en un joven que siempre viste de acorde a la situación por ello sus vestimentas suele ser su uniforme escolar y en casos excesivos un tinte casual.
Luego de terminar su desayuno, Francis tomó una ducha rápida, arregló sus ropa y se preparó para salir "Mamá me voy a la escuela"
"¡Francis, espera!"
"¿uh? ¿mama que sucede?" Francis volvió su cuerpo hacia su casa luego de haber dado solo unos pasos hacia el exterior, pero pronto su madre sujetó ambos lados de la cara del castaño sorprendiendo a este último.
"Ten cuidado en tu camino a la escuela y haz tu mejor esfuerzo, no tienes que preocuparte por los resultados nosotros te amamos y te amaremos siempre no importa el resultado"
Francis estaba sorprendido pero pronto su cara fue adornada por una cálida sonrisa que sorprendió a su madre, "No te preocupes mama, solo tengo que dar mi mayor esfuerzo y traeré a casa el récord guinness de arqueria. Traeré honor a la familia y no habrá nada ni nadie que pueda impedirlo"
"Cielos, siempre dando lo mejor de ti mismo, no hay como detenerte" la madre de Francis solo pudo acariciar la mejilla del castaño "Supongo que Anna estará contigo, entonces Karen y tu padre solo estarán presentes en la prueba y ellos te recogeran por la tarde. Tu hermano también sabrá la noticia en algún momento..."
"Mamá sabes que Anna no me deja sola, desde que comenzamos a salir no hay posibilidad de alejarme de ella" Francis se rió recordando a la joven de cabellos oscuros que siempre la acompañó desde su infancia hasta ese momento en particular.
"Bueno no tienen muchas posibilidades de separarse, ella es una artista famosa, es tu vecina y solo tienen una diferencia de un año, recuerdo que ella siempre decía que cuando creciera sería tu esposa y tu tendrias que hacer los quehaceres del hogar"
Al escuchar la última parte de la frase de su madre, Francis no pudo evitar avergonzarse e incluso su cabello se erizó "¡No tenias que recordar eso, mamá!" inmediatamente Francis se giró y salió corriendo sujetando el gran bolso que colgaba desde su hombro "Volveré tarde, recuerda que llegare a cenar con Anna para celebrar"
"Claro, me encargare de recibirte con una gran fiesta, todas las sirvientas estarán contentas de saber que hoy habrá fiesta, después de todo ellas te aman en secreto, dudo que Anna pueda mantenerte fiel si ella no hace su movimiento"
"¡Ahhhh!" Francis gritó mientras su cara se coloraba completamente "¡Me largo!"
En la escuela Francis es un estudiante normal, intenta no destacar más de la medida en cuanto a los estudios aun cuando en casa tiene profesores privados que lo adiestran en todos los ámbitos desde agricultura hasta la poderosisima política.
Si bien Francis se niega a mostrar su talento en el lado intelectual no es lo mismo en el lado deportivo, en la escuela Francis es considerado un prodigio a nivel nacional o incluso mejor, un atleta innato, no hay deporte en el que Francis no pueda destacar.
"Finalmente llegaste" Francis tuvo que recorrer toda la finca y cruzar medio terreno más para poder finalmente llegar hasta la casa de su novia Anna quien lo esperaba de pie justo a un lado de la gran puerta "¿Seguro que no quieres que Max nos lleve a la escuela?, el guardia estará más que complacido de ayudarnos, después de todo hoy es tu gran dia y nadie quiere que te sientas exhausto"
Francis solar batió su mano "No hay problema, ademas el aroma de la naturaleza me relaja, siento que es mi impulso para conseguir todo lo que quiero"
"Sigh..... realmente no hay caso contigo, bien supongo que no es necesario correr y podemos caminar, la escuela no causara problemas sabiendo que es tu dia" Anna recogió su pequeño bolso y caminó junto con francis por aquel camino lleno de árboles en plena floración.
Fue en plena primavera el día en el que Francis Sartre demostró su verdadero valor en los deportes y también el mismo dia en el que Francis comenzó su historia, cerrando su ciclo como heredero de la familia Sartre y comenzando como el lord de la antigua familia Makiri.
