✿【escisión】✿

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[«Esta historia terminó.
No existe.
Lo que un día construimos se ha esfumado.
Pareciera que es más fácil dejarnos,
pero eres un fantasma conmigo caminando». ]

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—Debemos romper.

El agraciado rostro de la fémina ostenta en cada rasgo la gravedad del asunto, e incluso la luz que ingresa a la barra de la cocina es incapaz de borrar la adusta línea de su frente.

Circunspecta y solemne, aun así: hermosa.

Todoroki está deslumbrado por ella y también atónito. Parpadea y por vez primera en mucho tiempo las palabras faltan a sus labios, a sus ideas.

El tiempo se ha detenido.

Todo se quiebra conforme la contempla rendirse y abrazarse a sí misma, inmersa en recuerdos y ausente de esa tibia mañana de julio.

.

..

El primer año en la U.A. High School estuvo colmado de nuevas experiencias, retos, crecimiento y, por supuesto, la formación de inestimables lazos.

Tal es el caso de Ochako Uraraka y Shoto Todoroki, quienes —sin percatarse— encajaron como dos piezas pérdidas de rompecabezas distintos.

Y no, no fue el tiempo lo que los unió.

Tampoco los escasos temas en común o los anodinos aperitivos que compartieron bajo el florecimiento de los cerezos.

Fue, simplemente, la inexplicable sensación de comodidad al estar junto a alguien cuya sonrisa —tímida o serena— te hace sentir que todo puede llegar a ser.

—M-me... ¡me...ME GUSTA ESTAR CONTIGO, SHOTO-KUN!

Expresó tras una profunda inhalación la joven de eternas mejillas sonrojadas, ganándose un beso en la frente por su valor.

.

..

Oteos, roces incidentales y guiños fugaces convencieron a Todoroki de realizar la temida pregunta:

—¿Saldrías conmigo, Uraraka?

La contestación fue más física que verbal, dado que el sexto tono del espectro solar se apoderó por completo de la impresionada fes de la castaña, la cual se desvaneció unos segundos después como si hubiese sido alcanzada por la particularidad de Midnight.

"¡La mataste, perro!", exclamó alguno de los presentes, dado que por cuestión territorial y práctica: Shoto-kun decidió confesarse al inicio de clases, con todos sus compañeros presentes —incluyendo a Aizawa-san—.

.

..

Horas después, Shoto permaneció al lado de la muchacha en la enfermería, procurando depositar de vez en cuando su mano derecha sobre la acalorada frente de su compañera.

—Estará bien, dejémosla dormir unas horas más.

Recovery Girl afirmó, para después recorrer la cortina de aquél cubículo y brindarle un poco de privacidad a esos dos tortolitos.

Después de todo, la muchacha no sólo se desmayó por un mal de amores, sino porque ha estado sobreesforzándose con el fin de obtener una beca que le permita reducir sus gastos escolares.

❀ Escisión {Todochako} ● !ReuploadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora