⊱Tú eres el Omega⊰│Yeongyu ◇ Beomjun│ »𝔸𝕕𝕒𝕡𝕥𝕒𝕔𝕚𝕠𝕟«

23

26 años

“Vamos a batallar para tener un bebé Beomgyu, somos alfas.”

“Existe una posibilidad y para eso, debemos esforzarnos mucho y agotar todos los recursos.” le beso el cuello su marido.

“¿Y qué pasa si por alguna extraña razón tu te embarazas al mismo tiempo que yo, al estar practicando esto de versatilidad?” preguntó inocentemente y Beomgyu se quedó quieto.

Se imaginó a Yeonjun con su pancita llena y a él mismo en la misma situación. Su imaginación voló, se encontró esa fantasía con ellos dos quejándose de todo y peleando por quién tenía el vientre más grande.

“Obviamente tu la tienes mas grande por ser más omega.”

“¿Qué dices? mírate gordo.” Yeonjun se paró enfrente de él y pegaron sus vientres, viéndose con rivalidad.

“No me gusta que me digas gordo ¿Esta bien?”

(...)

“Vamos Yeonjun levántate de la cama.”

“No puedo, levántate tu primero.” un silencio los rodeo.

“Tampoco puedo.”

(...)

“Dame un besito.” preguntó y Yeonjun lo miró enfadado.

“¿Porqué?”

“¡Porqué tengo ganas de un besito!” empezó a sollozar y su esposo se alarmó, pero al ver a  Beomgyu llorando, también empezó a llorar.

Entre lágrimas se abrazaron de lado (ya que sus enormes vientres no los dejarían abrazarse de frente) dejando fluir sus sentimientos dramáticos.

“Ven aquí te daré tu besito.” Yeonjun intento acercase de frente, con sus grandes vientres chocando, pero hasta un punto se quedó estancando, ya no podía avanzar y Beomgyu tampoco.

“No alcanzó.” lloró el rubio.

“¡No llores! Después... Voy.. voy a llorar yo.” término entre lágrimas Yeonjun.

(...)

“Mi bebé nació más hermoso.” decía un Yeonjun con un bebé azabache en sus brazos.

“El mío más... Espera, tu bebé también es mío.” Beomgyu pasó su mirada de su bebé castaño que estaba dormido en sus brazos al bebé que estaba con Yeonjun.

“Y el tuyo también es mío...” murmuró en la misma situación el alfa peliazul.

“Ambos son hermosos.” dijeron a la par, con una sonrisa mirando a sus bebés.

Regreso al momento actual y soltó una risa.

“Eso sería fantástico, hay que esforzarnos el doble.”