IYWM {jikook}

I. 04:00 en punto

Nota de la autora: If you were me, será resubida, porque tengo un pequeño toc que me costó más de un año resolver, y fue, arreglar problemas ortográficos, lagunas en la trama, a parte de, que me di el tiempo de agregar capítulos para mayor comprensión de varios temas que toqué y al parecer no pude profundizar bien.

Advertencia para nuevos lectores: If you were me no contiene sexo,si eso es lo que estás buscando. Toca temas psicológicos y sensibles. Está hecha con mucho amor y dedicación, espero que a pesar de eso puedas enamorarte de ella. 

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JUNGKOOK

"Puedes venir a casa si aún no has decidido irte"

Me pregunto dónde podría ir mientras aprieto el botón de bloqueo en el móvil para evitar el contacto con el brillo de la luz en la pantalla, como si, ya estuviese acostumbrado a la penumbra en la que ha caído el departamento que llevo habitando más de un año, y la molestia de algún destello me nublara aún más.

El teléfono vuelve a brillar al asaltar otra notificación de Yoongi, porque estoy seguro de que de mis padres no recibiré mensaje al menos hasta que salga el sol, y, en momentos así de la vida cuando no se tiene nada, es difícil contar con la preocupación de alguien más.

Arrastro los pies sin sueño a pesar de la hora hacia la cocina, con una tripa dolorida del hambre. Es quizá la decimosegunda vez en lo que va en el transcurso de la noche que abro la puerta del refrigerador, sólo para volver a corroborar que la última zanahoria del ramillete que he comprado hace tres días sigue ahí, burlándose de mi apetito. Una zanahoria, todo lo que tengo para comer. Ni un gramo de azúcar, ni un pedazo añejo de pan. Sólo una anaranjada y arrugada zanahoria.

De pronto creo sentir que ella y yo nos miramos. Debe reírse de este pobre niño tonto que tuvo todo en la vida y que, todo ha perdido. Y apenas puedo arrugar el entrecejo sintiendo los ojos picarme de la impotencia, o tal vez de la angustia y el dolor aplastante en la mandíbula, evitando aguantar las lágrimas. Porque tengo hambre y eso es todo lo que me queda, o porque el mundo no me ha avisado cómo se afrontan los obstáculos habiendo sido un niño mimado.

Resignado cierro la puerta y retrocedo un par de pasos hasta el mesón, donde he dejado el móvil y se encuentra arrugado el papel que me ha dejado la casera del departamento, avisando que debo desalojar el piso por la mañana. Mi billetera también está allí, reposando junto a un par de pequeñas boletas esparramadas. Sé que si vuelvo a revisar no encontraré centavos suficientes para comprar una piruleta.

Desearía que mamá llamara, pienso, o que incluso papá me pidiera que volviera junto a ellos. Pero sé también que la situación en la que se encuentran no es la óptima, y una boca más que alimentar con lo desajustados que ya vivían sería un problema.

Con la vista de un felino observo las siluetas de mis maletas junto al sofá, y en ellas todo sueño, toda aspiración. Porque lo he perdido, y lo único que me queda no son nada más que mis estudios, que quizá por lo pronto también peligren si no encuentro pronta solución al pago mensual de la carrera.

Yoongi vuelve a enviar otro mensaje: "Todo estará bien"

Hay veces que no puedes confiarle la tristeza a alguien más, no a tu mejor amigo, ni a su familia. También hay vergüenza de por medio, y orgullo, sobre todo vulnerabilidad. Y hoy, es de esas tantas noches que paso despierto pensando que sería mejor desaparecer, y así, este inmenso dolor en el pecho. Es de esas noches que no quieres ser molestia, aunque lo seas incluso existiendo, y te enojas, por creer que ese tipo de cosas sólo les pasan a otras personas, y sientes frustración por haber sido ciego y confiar que en la vida se tiene todo asegurado.