De todos, te prefiero a ti. (EXO-Kai-Luhan-Tao)

Capítulo 3

Lean nota al final por favor.

Capítulo 3

1ra peesona. Kristen

No era más que una mañana espantosa, había dormido horrible con la pelea absurda de anoche con Tao, si, era nuestro jodido aniversario y ni siquiera se acordó, más bien terminamos, la noche había sido una pesadilla, cuando me levanté para ir a la escuela por alguna extraña razón ya se había acabado el agua caliente, el pan de mi sandwich se quemó, se me hizo tarde, y por la misma razón cuando llegué a mi salón de clases me tuvieron que emparejar con el señor perfecto, justo después de que había discutido con él, obligandome a compartir mi espacio vital con él. Rodee el pupitre doble donde nos teníamos que sentar, y justo en frente del salón, tomé mis cosas e hice lo posible por ni verle la cara, pero allí estaba él, buscando contacto conmigo, ¿qué no entiende que a mi me vale verga estar o no con él?, ¿por qué a mi?, y a no a unas de sus tantas fans o acosadoras, ¿por qué a mi?.

-¿qué?   -respondí a su continuo toqueteo con su lapiz en mi brazo, seca, fría y distante, a ver si entendía la indirecta-

-intenté hablarte estos últimos días, desde el día que te fuiste de mi casa, pero no sé cómo logras escabullirte tanto de la vista -rió para si para recibir una mirada mía de mala muerte- en fin, no terminamos bien nuestra conversación y creo que me malinterpretaste, ¿crees que saliendo de clases podríamos...

-no lo deje terminar, mi día era ya lo suficientemente horrible como para, por voluntad propia, hacer que se hiciera peor- no, tengo cosas mejores que hacer, tú sólo sigue con tu vida, imagínate que el otro día no sucedió, y haz lo que dijiste,  sólo necesito que le digas al idiota este -señalé la espalda de Subaenim, nuestro profesor- que yo fui quien hice toda la estúpida tarea me giré dejandole solo de vista mi perfil, porque si por mi hubiese sido me hubiese largado para no tener que verle la cara a ninguno de los allí presente-

-pero yo...

-nada -en seguida Subaenim se giró y nos dio una mirada acusadora y de advertencia a ambos-, cállate, te juro que si me meto en problemas por tu culpa te mato -le acuse para luego tomar mi asiento y alejarlo más de él. El chico no hizo más que quedarse callado y prestar atención al pizarrón-

Bueno, las horas de la infernal escuela habían terminado, como vivía tan cerca siempre me iba caminando, si, habían compañeros que vivían cerca de mi casa, pero simplemente no me relaciono con nadie, ni me gusta pedirle nada a nadie.

Estaba a medio camino cuando accidentalmente hundida en el fragor de mis audifonos choqué con una moto que estaba aparcada en la cera, recostada contra una pared, miré hacia arriba y esperando ver el rostro molesto de un hombre robusto, con barba, chaqueta negra, lentes oscuros, tatuajes y de unos cuarenta o cincuenta y tantos me encontré a Tao, mierda, de todos los que tenían una estúpida motocicleta en Seúl me encuentro a Tao. Le fulminé con la mirada y me reajusté para seguir caminando, pero claro ahí no terminaba, él tenía que seguirme.

-¿cómo has estado? -seguí caminando, sin siquiera mirarle-, entiendo, no quieres hablarme, no te culpo -buscó otra vez mi mirada, la cual no encontró- ¿podemos hablar?, por favor

-claro esperame aquí, voy a dejar mi mochila a casa y vuelvo, así podemos ir a un motel cerca y listo, luego puedes irte sin ninguna necesidad de llamarme, buscarme o lo que sea -le enfrenté el rostro mientras dije aquellas palabras y luego seguí caminando con el chico pisandome los talones- ¿por qué no mejor vas por tu moto?, yo tú y no dejara que ese par de chicos la sigan viendo con tanto interés señalé hacia atrás a un par de chicos de dudosa procedencia y a los cuales se les veía muy interesados en aquella moto. El chico sin pensarselo fue corriendo sobre los dos intrusos y después de ahí no sé porque aproveché el espacio para escaparme-

MTV Cribs era lo que pasaban por la televisión, me había puesto un camisón azul que me llegaba hasta medio muslo, me había enterrado en mi cama y estaba con todo mi pelo alborotado, el aire acondicionado estaba encendido, tenía mis medias de tortugas puestas, había puesto canciones al azar y salían una tras otra de las vocinas, actualmente sonaba "I me mine" de "The Beatles". Estaba completamente sola en la casa, mamá se quedaba a comer en el trabajo por lo que todavía a las cuatro de la tarde no me decidía en levantarme a hacerme algo de comer, así que como toda mujer independiente y autosuficiente que soy, ordené una pizza. Había pasado ya el tiempo correspondiente, escuché el timbre y sin importarme como estaba, en pijamas, medias de tortugas y echa un desastre, bajé a buscar mi correspondiente...¿comida?, más bien merienda.

-quedate con el cambio -dije sin siquiera fijarme quien estaba al otro lado de la puerta, pues para mi sorpresa- ¿qué demonios haces tú aquí?, ¿cómo averiguaste dónde vivo?, tú estás mal de la cabeza, completamente

-hice algunas investigaciones, o más bien te seguí en mi auto cuando salías de clases, quería saber dónde vivías y aparentemente en la escuela nadie sabe -si, era Kai-

-definitivamente llamaré a la policia. ¡Largo! -le apunté el camino tras él-

-¿no me invitarás a pasar? -dijo para él mismo entrar con una auto invitación- linda casa estrellita

-salte, mi mamá tendrá que llegar en algún momento y no quiero que me encuentre sola contigo -mentí, eso no me importaba en lo absoluto, pues no habían sido ni una ni dos las veces que nos había encontrado a mi y a Tao solos, sólo que no quería al señor perfecto dando lata en mi casa- vete

-por favor, soy inofensivo -se quedó viendo mis fachas por un momento- lindas tortugas -dijo señalando a mis pies graciosamente. Le fulminé con la mirada- si me dejas quedar te pago la pizza

-¿qué demonios quieres Jong In?, dime, ¿qué quieres? -dije ya resignada y sacada de quicio-

-quiero que me disculpes por como te saqué de mi casa el otro día, sé que te dije que ya no necesitabamos más reuniones o lo que sea para ayudarte a terminar el.proyecto, pero es que tú demostraste que lo podías hacer sola, y además siempre me enviabas indirectas de que no querías estar conmigo, sólo que no sabía que en realidad te importase ir a mi casa -lo soltó todo, y en sus ojos se veía la sinceridad-

-bien, no hay problema, ¿ahora te puedes ir? -insistía e insistía, pero él seguía allí parado-

-o me puedo quedar a comer esa pizza contigo -sonrió, con una perfecta sonrisa que a cualquier chica del insituto hubiese matado, menos a mi-

-no, vete -insistía, sólo quería estar sola-

-¿es esa I me mine de The Beatles? -señaló al aire con una pequeña sonrisa en su rostro- amo esa canción, no tiene sentido, pero la amo -rió levemente-

-bien, pues escuchala en tu auto, ah mira, ¡está ahí afuera! -le hablé como si se hubiese ganado un premio de la lotería-

-bien, entiendo, quieres estar sola, me voy, pero tienes que aceptar volver a pasar por mi casa, aunque sea a insultarme o lo que sea que te guste hacer, pero por favor -casi rogó-

-me lo pensaré -dije antes de soltarle la puerta en la cara-

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Perdonen que este capítulo sea tan corto, pero en serio tenía ganar de escribir y publicar esto, así que lo hice.
Era sólo para decirles que estaré subiendo capítulo todos los viernes, y ¿quién sabe si los jueves también?, podría ser otro día de la semana, cualquiera, pero por mientras lo viernes son fijos.
Sólo quería decirles eso, y que voten por mi historia por favor, yo tenía meses sin visitar Wattpad, pero sin aviso empezaron a llegar muchos votos y visitas y no sé, lo vi como una señal y en seguida empecé a escribir.
¡Gracias a todas las que leen!

Y por favor deja un comentario abajo de què te pareció, en serio quiero saber qué piensas acerca de lo que escribo, es muy importante para mi.

¡Besos!, y hasta la próxima ♥

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