Capítulo II.

131 11 6
                                    

N/a: ¿¿¿Qué les regalaron para reyes??? Espero que algo muy cool. Aquí el segundo capítulo :-O lo sé, super tarde, pero aquí está!!! Que lo disfruteeeen :) !!

-*-

No podía ser verdad ¿Seth, el ayudante de Jeffer, era mi vecino? Qué vergüenza, me había visto chocar  torpemente contra un árbol. Un árbol.

Seth me miraba, gracioso e intentando aguantarse la risa en público. Admito que yo también me estaría riendo, pero no tengo idea de quién es y ya de seguro había tenido una mala impresión de mí.

—¿Qué tal chicos? Vendré a ayudar a el profesor Jeffer con las clase de gimnasia de ahora en adelante. ¿Preguntas?—soltó él, sin quitar su mirada de mí. Se me hacía bastante incómodo, por lo que desvié mi mirada a todo lo que tenía a mi alcance, mis uñas, las puntas de mi cabello, mi short deportivo. Seguramente no parecía estar disimulando, pero nunca había aprendido a hacer tal cosa.

—¿Qué edad tienes?—preguntó Diana, una de las porristas del equipo. Levantó su mano y la agitó en el aire para llamar su atención.

—Diecinueve—sonrió, quitando sus ojos de mí para mirar a la chica de cabello rubio brillante.

—¿Tienes novia?—preguntó disimuladamente Megan, mirando hacia otro lado para que no supiese quién preguntó.

—Suficiente, chiquillas alborotadas. ¡Ahora pónganse de pie y cuarenta vueltas a la cancha!—gritó el viejo amargado que teníamos de profesor.

Me puse de pie y comencé a correr junto a Megan las vueltas que Jeffer nos había dicho.

—¿Qué tienes con él?—preguntó Megan corriendo a mi lado, me miraba con el ceño fruncido.

—¿De qué hablas?—miré hacia el frente, evitando su mirada acusadora en la mía, me ponía nerviosa.

—De Seth, Mey. ¿A caso no viste cómo te mira? ¡Está haciéndolo en este momento!—dijo dando saltitos mirando hacia atrás por encima de su hombro.

—¿De verdad?—miré hacia atrás pero estaba hablando con el profesor. Su mirada se quitó de él y me miró sonriente, luego rascó su barbilla, sabía que comenzaría a reír—¡Oye, no estaba mirándome!—le grité en un susurro.

—Y tú te fijas, tonta. Vamos, dime que traes con ese Seth Hunter.

—Nada Megan, sólo que hoy me pareció haberlo visto y no actué de la forma adecuada a... la situación—murmuré, apenas separando mis dientes.

—¿Qué hiciste ahora, Mey Collevan? —preguntó ella acomodando su coleta y levantando los breteles de su camiseta sin mangas de gimnasia.

—Yo... es que me choqué contra—iba a terminar mi frase cuando mi amiga me interrumpió.

—¡Debes estar de broma! ¿Te chocaste cobra él? ¡Qué romántico! ¿Y qué pasó, intercambiaron números o algo sin saber que lo volverías a ver todos los días en gimnasia? Yo¿Se casarán y tendrán hijos hermosos como él?—.

—No tonta, baja de tu pony arcoiris, no me choqué con él, choqué contra un árbol—chillé entre dientes.

—¿De verdad?—yo asentí. Sus carcajadas comenzaron a flotar en el aire con fuerza, tanto que daba miedo encontrarla riéndose por las noches. La gente comenzaba a mirarnos, incluso podía sentir la mirada de los chinos desde la otra parte del mundo.

—¿Algún chiste que quiera comentar con la clase?—dijo el profesor Jeffer enfadado, haciendo que Megan y yo nos detuviéramos, pero ella no paraba de reír de mi fracaso como persona normal.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 06, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

En Problemas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora