ALOM-Albalia

Neo

POV ALBA

Paseamos por las calles colindantes a mi casa, Natalia miraba toda la arquitectura futurista maravillada. No dejaba de señalar cada edificio, cada cristal, cada fachada, no se perdía detalle de nada. Muy pronto llegamos a la calle central del área 47, la famosa calle Tomorrowjuana, pronto nos encontramos delante del mayor centro comercial del nuevo mundo, GODS.

-Quiero entrar ahí, por favor rubia- dijo poniéndome un puchero difícil de resistir.

-Solo un rato, ¿vale?- dije firme.

-Si, lo que tu quieras- dijo cogiéndome de la mano, entrelazando nuestros dedos, haciendo que yo me sonrojara y ella feliz me arrastraba dentro de Gods para que no me perdiera entre tanta gente. -¡Hay muchísimas tiendas Alba- dijo emocionada -¿Cual es esa y esa y esa y esa?- dijo señalándome cuatro de las tiendas más grandes del centro comercial, no paraba de señalarme todo lo que veía.

-Una por una- dije riéndome al verla tan exaltada -Mira, esa de ahí se llama Hades, es una tienda que vende accesorios para animales, es la más popular en su mundillo, los animales son un gran apoyo, aparte de los androides para los humanos- dije mientras caminábamos más despacio de la mano. -La otra que has señalado es Zeus, allí venden armamento, a pesar de que no se permite el uso de armas, hay diversos trabajos que te otorgan licencia para su uso, por eso es la única tienda de todo el área especializada en ello- ella asentía contenta de poder aprender.

-¿Y esa rubia?- dijo indicándome la tienda más grande del centro comercial, se había quedado empanada al verla.

-Esa es Afrodita, es una tienda de perfumes- me miró confundida. -Los perfumes sirven para que reconozcas a una persona por su olor, la gente se suele echar un poco detrás de las orejas y en las muñecas- ella intentó comprender lo que decía, se acercó a mi cuello y sin ningún pudor me olió, haciendo que a mi me diera cosquillas.

-Me gusta como hueles tú- dijo sonriendo -¿Yo también puedo oler bien?- dijo triste.

-Cada persona tiene su olor, su perfume y lo identificas por ello. Sin embargo, que uses un perfume no significa que huelas a ese perfume, hay veces que tu puedes tener tu olor característico mezclado con la colonia. Debido a esto, un mismo perfume, en personas diferentes puede oler de otra manera- dije terminando mi explicación. Se veía triste, ostias que no la he contestado. -Vamos a entrar y encontrar uno para ti- dije sonriéndole.

-¿De verdad rubia?- dijo con toda la ilusión del mundo y yo asentí. -Pues venga, vamos- dijo tirando de mi mano.

En cuanto entramos Natalia empezó a quejarse de la cantidad de olores que había, me di cuenta con estos comentarios que tenía un olfato más desarrollado. Treinta minutos después seguíamos en la tienda, habíamos mirado más de cien perfumes, pero ninguno le convencía.

-¿Y cuál usas tú?- me preguntó con una sonrisa.

-Pues...- dije mirando todos los perfumes hasta que encontré el mío -es ese- dije señalándolo. Se quedó estática, de repente tiró de mí para ir a la otra punta de la tienda.

-Está aquí rubia- dijo contenta.

-¿El qué está aquí?- dije un poco desconcertada.

-Mi perfume, se que está aquí- miró y olió toda una fila de perfumes. -Es este- dijo apuntando un perfume Calvin Klein Everyone