Cálido fue el reencuentro de dos almas que se buscaban desesperadamente.
Promesas de primavera hicimos
Que juramos nunca romper, Diferentes caminos seguimos
Pero siempre en ti confiaré.Nunca nos dejamos de querer
Y así finalmente nuestro cariño llegó a florecer.Limpiando nuestras lágrimas,
Curando nuestras heridas,
Con sólo un beso en la frente
Y nuestra eterna promesa.Juntas hasta el final
Con nuestras manos entrelazadas,
Susurrando dulces palabras,
Que sólo los ciegos pueden disfrutar.