My Only One 2 •Editando•

Capitulo 55

Nunca me ha gustado vestirme totalmente de negro, no me gusta la sensación que me da el ir a un entierro, me trae dolorosos recuerdos, tenia puesto un vestido largo hasta las rodillas con unas mangas que me cubrían los brazos por completo, no me había maquillado, solamente me arregle el cabello, no tenia caso hacerlo si sabia que era inevitable llorar.

Alex salió del hospital ayer, mis padres y él se quedaron en mi departamento, no hemos hablado mucho desde lo que sucedió y cuando lo hacíamos eran palabras cortas, mi hermano estaba completamente destrozado.

Estoy segura que si Liam no estuviera a mi lado en estos momentos, estaría destrozada sin fuerzas y no sabría como poder ayudar a mi hermano, pero no... él está aquí, y con solo un abrazo, un beso o solo tomar mi mano, me hace sentirme tranquila.

Los padres de Miranda habían llegado la noche anterior, no los conozco, solo los he visto en algunas fotos. Pero ahí estaban en el panteón, llorando... dos personas que acaban de perder a una hija, varias lagrimas se deslizaban por mis mejillas. Mi madre lloraba y abrazaba a mi padre, quien trataba de ser fuerte, pero podía ver que se le escapaba de los ojos una que otra lagrima. Alex lloraba desconsoladamente mientras lo abrazaba. Hoy sería un día que nunca olvidaríamos, por todo el cariño que Miranda dejo en nuestros corazones.

Tengo que ser fuerte, tengo que ser fuerte por Alex...

Las palabras de Miranda sonaban una y otra vez en mi cabeza...

"-se feliz Hailey... la vida es demasiado corta para no vivirla... hoy estamos aquí y mañana tal vez no"

Gracias Miranda... por todo... siempre fuiste una gran persona.

(...)

Horas más tarde nos encontrábamos en mi departamento, mi madre comenzó a prepararnos algo para comer, no había dicho mucho desde que regresamos del panteón. Mi padre se fue directo a la habitación, sabia que su manera de procesar la tristeza era aislándose así que no le vi problema. Por otro lado, Alex... se encontraba sentado en el sofá mirando el televisor, como si este estuviera encendido, pero solo era la pantalla negra, no había lágrimas, no había rabia, solo ese vacío. Me acerque en silencio y me senté junto a él sin decir una sola palabra, después de unos segundos recargue mi cabeza en su hombro, podía sentir como su cuerpo estaba tenso, él simplemente me rodeo con su brazo, permitiéndome abrazarlo.

[...]

Mis padres ya se habían ido, mi padre tenia trabajo y no podía faltar más, horas mas tarde me encontraba recogiendo el departamento y pude ver a Alex en la habitación de invitados, tenia algo entre sus manos y lo sostenía con delicadeza.... Era el collar de Miranda. El mismo collar que él le había regalado, y que formaba parte de ella, sentía un dolor en el pecho al verlo llorando mientras lo acercaba hacia si mismo, entre a la habitación y me senté junto a él

-no se si voy a poder con esto...

Dijo con una voz temblorosa, trague saliva

-si vas a poder... tal vez no hoy, tal vez no mañana... pero se que vas a poder

Le di un beso en la mejilla y dejé que su cabeza se recargara en mi hombro mientras el lloraba en silencio. Alex sabia que no estaba solo, me tenía a mi...

(...)

Era la hora de dormir, horas antes había pedido una pizza para que Alex comiera algo, pero ni siquiera la miro, solamente giro su cabeza como si el olor le revolviera el estómago. Tenia tantas cosas en mi cabeza que no me sentía capas de poder ir a la universidad, no quería dejar solo a Alex, se que el no me lo pedirá y aun así quería hacerlo, me acosté en mi cama pensando en todo lo que nos pasaba y si estaremos bien.