Capítulo Único.

1.8K 198 73
                                    

Advertencia: Contenido no apto para todo público, incluye temas sobre sexualidad, si esto no es de tu agrado sabes donde está la salida, por lo que te invito a retirarte sin necesidad de malos comentarios, sin más que decir... comencemos.

.

.

.


— Eres un idiota. — Sasuke pronunció cuando notó recién que Naruto no tenía ni idea de donde se encontraban. — Te juro que...

— ¿Qué? ¿Qué vas a jurarme, Sasuke? — Naruto se levantó del suelo, enfrentándolo.

Eran amigos, pero los dos estaban bastante estresados con la caminata que duró más de dos horas, el agua se acababa y Sasuke estaba seguro de que en cualquier momento la lluvia caería sobre ellos. 

Los dos sabían que había sido una mala idea separarse del grupo de su escuela para buscar leña y que Naruto se haya ido por ''un camino mejor'', pero ya era demasiado tarde para retractarse.

El azabache se dejó caer junto a su pesada mochila, sentándose en la tierra e ignorando a su estúpido amigo frente a él.

— Tal vez nos estén buscando, hemos estado más de cuatro horas perdidos, estoy seguro que en unas cuantas horas más nos encuentran.

— ¿Unas cuántas horas más? Naruto, ¡ya va a oscurecer! ¿Tú crees que ellos harán el esfuerzo de buscarnos por la noche? ¡Claro que no!

Naruto pateó una piedra poniendo mala cara, Sasuke tenía algo de razón. No podían hacer el sacrificio de buscarlos por la noche, alguien podía robarles o hasta un oso podría comérselos, igual que a ellos...

— Si me muero dile a mi madre que la amo... y a Deidara que no entre a mi habitación.

Sasuke rodó los ojos. — Naruto no vamos a morir, no seas exagerado.

Con un suspiro el rubio se puso de cuclillas e inspeccionó su mochila en busca de su botella de agua ya casi vacía. Sólo tenían dos barras de cereal y un ramen instantáneo, luego de eso el ojiazul sabía que iba a morir de hambre y tal vez a causa de la falta de agua, por la desesperación Sasuke se comería su cuerpo. Le dio un pequeño sorbo a la botella.

— Recuerdo cuando éramos pequeños y tú tenías un ratón de mascota. Yo lo odiaba mucho porque ya no me tomabas tanto en cuenta, un día vi que tú habías dejado mal cerrada la puerta de su jaula y esa cosa se salió... yo no la quise detener, por eso la gata de tu mamá se lo comió, lo siento, Sasuke.

El pelinegro chasqueó la lengua, tomando una rama para dibujar en la tierra. — Eso ya me lo habías contado, ese día que pensaste que íbamos a morir encerrados en el ascensor, ¿recuerdas?

— Ah, sí. — Naruto soltó una risita, la cual fue casi inaudible para él mismo. — Tú dime algún secreto que jamás me hayas dicho.

— ¿Por qué haría eso? — la rama con la cual estaba jugando fue quebrada al intentar pasarla por debajo de las zapatillas de Naruto.

— ¡Vamos! Yo siempre te cuento secretos cuando estamos a punto de morir, es tu turno.

— Y todas esas veces fueron en vano, aún seguimos vivos... así que cállate.

— Pero presiento que esta noche moriremos congelados, hace mucho frío como para que...

— Una vez intenté besarte mientras dormías, no pude ya que te diste vuelta. — soltó como si hubiese sido cualquier cosa, normal y relajadamente, pero Naruto se había quedado asombrado. ¡Había tratado de besarle mientras dormía! Eso no era normal.

Bonfire. [SASUNARU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora