𝑨 𝑺𝒆𝒄𝒐𝒏𝒅 𝑳𝒐𝒗𝒆 ♦️ [𝑵𝒂𝒎𝑺𝒆𝒐𝒌]

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Estaba nervioso, su olor lo delataba, pero ¿Quién no estaría nervioso mientras se estuviera haciendo una prueba de embarazo?

Los dos años que llevaba con su alfa habían sido tan maravillosos que jamás pudo a ver vivido, o al menos así él lo sentía, había hablado por tanto tiempo con su alfa de tener una familia que este momento se volvía lentamente en un sueño hecho realidad, aunque apenas llevara solo un año con su marca.

La marca echa por su alfa, comenzaba a lucir más hermosa de lo que jamás había estado gracias a la gran emoción que sentía, no dudaba que YoonGi podía sentir su emoción donde sea que estuviera.

Con su mejor amigo, Jungkook, estaban esperando el resultado, el omega no podía evitar dar pequeños saltitos en su lugar ansioso, cuando al fin paso el tiempo salió corriendo al baño buscando la prueba de embarazo. Cerro los ojos por un momento tratando de controlar sus emociones, abrió uno solo por la tentación de ver de una buena vez por todas el resultado, al verlo abrió ambos ojos dando un grito de emoción junto con un pequeño saltito.

-¡Jungkook!- Salió corriendo encontrándose con su amigo que iba corriendo hacia el baño- ¡Es positiva!

El pequeño alfa al escuchar lo dicho por su amigo sonrió dejando ver su linda sonrisa de conejo, vio la prueba con las dos rayitas rosadas y como si fuera el mismo el omega en estado grito emocionado dándole un fuerte abrazo a Hoseok.

-Felicidades hyung.

Una amistad entre un Alfa y un Omega no era muy común, pero considerando que Hoseok conoció a Jungkook incluso antes de que se presentara como alfa era una excepción. Hoseok juraba que Jungkook se iba a presentar como Omega gracias a la tierna forma de ser, pero ahora solo lo veía como uno de los Alfas más respetuosos y amorosos que jamás haya conocido.

Se escuchó como la puerta de su casa era abierta haciendo que Hoseok se soltara del abrazo de Jungkook corriendo en dirección a YoonGi, su alfa.

Frunció el ceño al sentir varios olores provenientes de alfa, pero tranquilizo a su Omega recordándole que su novio trabajaba en una oficina repleta de Alfas, Omegas y uno que otro Beta.

-Hola mi amor ¿Cómo te fue hoy?- Pregunto viendo como YoonGi dejaba sus llaves en una pequeña cajita cerca de la puerta.

-Estoy muy cansado- Iba a pasar por un lado del Omega cuando sintió un olor diferente en la casa.

Tomo a Hoseok por las caderas y coloco la nariz en el cuello del Omega identificando así un olor a menta y chocolate que lo hizo gruñir cuando se dio cuenta que ese olor estaba por toda la sala.

Iba a preguntar quién había estado en la casa hasta que una puerta se escuchó abrirse.

-Hoseok hyung, su jabón de manos hule muy bien- Jungkook entro con sus manos puestas en su nariz para poder oler bien la fragancia de uva del jabón de manos.

-¿Qué hace él aquí?- Pregunto YoonGi al ver al Alfa que claramente no le caía bien.

Siempre estaba junto a Hoseok, ¿Qué no le quedaba claro que la marca que Hoseok llevaba en el cuello era suya? Él era suyo. Un gruñido salió de sus labios y sus colmillos se estaban haciendo notar.

-Eh tranquilo amigo- Dijo Jungkook alzando las manos- No es necesario mostrarme los colmillos y gruñirme, yo solo vine ayudar a hyung en algo- Pero eso no ayudo de mucho, aunque YoonGi ya no gruñía aún estaba mostrando sus colmillos. En verdad estaba molesto con su presencia

-Amor- Se acercó a su novio colocando una mano en su espalda- No te preocupes, sabes que Jungkook es solo un amigo- Comenzó a dar pequeños movimientos circulares para calmar a su alfa.

El aroma de YoonGi se estaba comenzando a poner más agrio, de lo que ya era, la lima se comenzó a sentir a gran escala junto al olor de pino, característico de YoonGi opacando así el aroma de Jungkook. Era muy claro que de los dos él era el más calmado sin importar que estaba siendo casi atacado por otro alfa.

-No te preocupes YoonGi, yo ya me iba- Comenzó a caminar en dirección a la puerta con la mirada de YoonGi siguiéndolo- Cuídate Hoseok, hablamos luego.

Cuando al fin se escuchó la puerta siendo cerrada YoonGi al fin pudo guardar los colmillos, la molesta se podía sentir por su cuerpo, le había dicho una y mil veces a Hoseok que no quería a ese alfa de nuevo en su casa, pero parecía que el menor ignoraba sus palabras.

-Amor...- Trato de acercarse a su pareja con la esperanza de tratar de calmarlo con su aroma y tratar de que se dé cuenta del cambio en su aroma por el embarazo, esperaba que la noticia lo animara tanto como a él lo hacía.

-¡Parece que lo haces apropósito!

Aquel grito hizo que el omega se encogiera de miedo, en las últimas semanas se había vuelto ya una costumbre los gritos de parte del mayor por cualquier cosa, haciendo que poco a poco el lobo en el interior del omega se comenzara a sentir inseguro con el que era su pareja, pero como siempre pasaba, no dijo ni una sola palabra.

-¡¿No vas a decir nada Hoseok?!- Un largo suspiro se escuchó salir de sus labios, aquellos que una vez le consagraron amor- Parece como si lo hicieras a apropósito ¿Cómo crees que me siento si veo a mi omega en casa solo con otro alfa? Es un maldito mocoso que con la mínima oportunidad se te va a lanzar, no seas ingenuo.

-¿Tan poco confías en mí?-Su mirada fue bajando hasta lograr ver la prueba de embarazo que estaba en sus manos, parecía como si el alfa estuviera tratando de no ver lo evidente.

¿Cuándo fue este tipo de peleas se habían vuelto una costumbre? ¿En qué momento su lobo y él habían dejado de sentir la necesidad de calmar a su alfa dándole paso a minutos eternos de gritos y reclamos? ¿Acaso eso era amor? ¿Acaso ese era el amor que él merecía?

Con temor paso su mano detrás de sí, no era un buen momento para dar una noticia tan importe, no quería usar a su cachorro.

-La situación hace que no pueda confiar en ti, en mi casa encuentro a mi omega con aroma del alfa que está siempre a su lado y a él lo veo salir del baño. La situación se explica sola ¿No crees?

El mayor sin decir algo más se fue directo hacia su habitación dando por terminada la pelea, aquella que se volvía una constante cada vez que él se veía con Jungkook.