Capítulo 1º.

66 4 4
                                    

Miraba por la vente, embobada en la lluvia que caía ahora. Las matemáticas son muy aburridas, a mi no me van a servir de mayor, así que no sé para qué las doy. La señorita daba vueltas por las mesas, para ver si estábamos haciendo lo que ella pidió. Yo estaba con el móvil, hablando por un grupo de whatsapp que habían hecho los de clases.

Ahora mismo estábamos hablando todos los de la clase, y la señorita no se daba cuenta, eso era gracioso.

Blanca: Chicos, ¿habéis terminado los ejercicios? -Habló mirando las libretas y todos soltamos un Noooo-

Daniel: ¿Cómo quieres que terminemos los ejercicios si tú nos pones nervisioso dando vueltas? -Soltó Dani en alto de repente-

La clase rió al unísono, y la señorita lo miró de mala gana haciendole una seña en forma de que dejara la clase.

Daniel:  No seño, no me jodas -Se levantó de su sitio dirigiéndose a la puerta-

Dani, era alto de ojos marrones y moreno. Era popular en la universidad, y casi todas querían con él. A mi no me llamaba mucho la atención ese chico, ya que era un chulo, y para chulo mi pirulo. Él coqueteaba con todas las que pasaba por delante, todo lo que tuviera dos ojos y una boca para él estaba buena. 

La clase pasó rápida, sin gritos ni liarla, ya que Dani y Antonio no estaban en clase para dar por culo. El timbre sonó indicando que la jornada de hoy había terminado. Recogí mis cosas y salí de allí corriendo.

*  *  *

Estaba en la habitación con Jessica, y ella se estaba preparando para subir a la fiesta que habían montado Dani y Antonio. Yo estaba totalemnete claro que no iba a aparecer por allí ni de broma. Ella llevaba una falda negra pegada, un top rosa y tacones de abuja. Pintada super exagerada, y con tres kilo de perfume.

Yo: ¿Pero a dónde vas? -Le grité riéndome al verla salir del cuarto de baño -No vas a una boda -Exageré mirándola-

Jessica: Hombre, tengo que ir presentable a la fiesta del bombóm ese -Habló, y yo negué riendo-

Yo: Eres un caso, tira para arriba y dile al Oviedo, que cómo monte mucho escándalo, subo con la fregona -Advertí sentándome en el sofá con un libro-

Jessica: Que sí, que sí -Se rió cogiendo su móvil -Escucha, que si no estoy aquí antes de las cuatro, sube que me estaré follando a todo lo que se mueva -Yo abrí los ojos de par en par mirándola-

Me laventé y me dirigí a la puerta abriéndosela.

Yo: Tira, que no te quiero ver más -Ella levantó las brazos saliendo por la puerta -Adiós anda -Le mandé un beso y cerré-

Me tiré al sofá a leer un rato. Conecté mis cascos y puse música a ver si podía relajarme un rato.

*  *  *

No podía dormir, eran las 02:14 y había un escándalo arriba que no era normal. Daba vueltas en la cama tapándome los oídos y poniendo caras raras.

Yo: Dios, maldito Oviedo -Me quejé levantándome-

Me puse mis zapatillas de andar por casa, y recogí mi moño y me puse la bata. Subí arriba y me puse delante de la puerta, y empecé a dar timbrazos. Dani abrió la puerta y se me quedó mirándome.

Yo:¿Te doy un consejo? -Le vacilé mientras le empujaba -Una foto te dura más -Hablé de mala gana mirándole, su expresión de sonrisa vacilona cambió al completo-

Daniel: ¿Qué quieres niña? -Dijo mirándome de arriba abajo-

Yo: A mi no me llames niña, vamos a llevarnos bien -Dije poniendome las manos en la cintura-

Él me miró vacilante cerrando la puerta detrás suya. Yo le miré con el ceño fruncido.

Daniel: Yo te diré lo que a mi me de la gana niñata -Me dijo colocándome los brazos en la pared a los lados de mi cabeza-

Un escalofrí recorrió mi cuerpo, y la luz del pasillo se fue.

Yo: Dani, no me toques la moral, que no la tengo para meneos -Le avisé y él pegó su cuerpo con el mío-

Daniel: Bien, pues no vengas a molestarme que la fiesta es divertida, hasta que vino la choni -Soltó de repente-

Lo mato. Lo mato.

Yo: Mira niño a mi no me llames choni, porque vamos a tenerla entonces - Le dije mirándolo a los ojos-

Él se quedó mirándome a los labios mordiéndose su labio inferior. Me puse nerviosa, y de repente su boca estalló con la mía. Sus labios se movían con los míos al compás y su mano viajaba ahora por mi espalda. Agarré su camiseta y él gimió por lo bajo. Sus manos fueron a parar a mi culo, y lo toqueteó seductoramente. Nos separamos por falta de aire.

Daniel: ¿Ahora la vamos a tener también? -Vaciló mirándome y yo me tapé la boca-

Qué coño he hecho.

Yo: Disfruta de tu fiesta, adiós -Dije corriendo para las escaleras-

Bajé y me encerré en mi cuarto. Mierda, me había besado con el chico más repelente de la universidad, asco asco asco.

Stay with me.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora