CAPÍTULO 24

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NARRA EVA
Dicho y hecho, terminamos de desayunar, ayude a Hugo preparar algo de comer para ir al campo y nos despedimos para vestirnos. Entre en casa de Flavio y di los buenos días tanto a él como a Sam que estaban desayunando
Eva: Buenos diassss
Flavio y Sam: Buenos diasss
Eva: Chicos, no como en casa —dije dirigiéndome a mi habitación—
Flavio: ¿Donde vas?
Eva: VOY CON HUGO AL CAMPO —dije gritando ya que ya estaba en la habitación—
Flavio: ¿Y eso?
Eva: ES EL ÚLTIMO DÍA ANTES DE VOLVER A CLASE Y QUEREMOS TENER UN RATO PARA NOSOTROS Y PODER HABLAR
Flavio: Bueno no volváis tarde que madrugamos
Eva: Vale papa
Él me dedicó una sonrisa y yo ya estaba lista en ese momento Hugo toco el timbre y fui a abrir, me dio un beso en la mejilla y entró a despedirse de Sam y Fla, le dimos un besos a cada uno en la frente
Sam: Cuídamelo ehh —dijo dirigiéndose a mi—
Eva: Yo te lo cuido —le giré un ojo—
Flavio: Lo mismo te digo Hugo
Hugo: A sus órdenes sargentos
Nos reímos todos ante su comentario y salimos. Nos montamos en el coche y estuvimos cantando con la música a tope casi todo el camino, estaba disfrutando como una niña chica. Llegamos al lugar y era realmente bonito, estaba plagado de un césped verde, algunas florecitas de colores y se podía respirar el aire fresco, era un lugar súper tranquilo.
Hugo: ¿Te gusta?
Eva: Esto es precioso Hugo, gracias por traerme aquí para despejarme
Le di un abrazo y bajamos las cosas del coche, fuimos debajo de uno de los pocos árboles que había, ya que daba sombra y extendimos una especie de mantita de colores para poder sentarnos, colocamos la mochila con la comida para que no se volara y después nos sentamos.
Eva: Que paz, este podría ser un buen llegar para evadirnos de agobios, de exámenes y todo
Hugo: Pues si y si es contigo más que mejor
Estaba sentada con mis piernas estiradas y Hugo a mí lado con las rodillas encogidas, yo quería tenerle más cerca aún así que
Eva: Ven, apoya tu cabeza aquí —dije señalando mis piernas—
Hugo: Voyyy
No tardo ni un segundo en acomodarse sobre mi, pero no sin antes dejar un suave y tierno beso en mis labios. Estuvimos un rato en silencio mientras le acariciaba el pelo.
Eva: Cuéntame de ti, ósea de tu infancia
Hugo: Pues yo era un niño feliz como todos la verdad, iba al cole, salía al parque con mis amigos y todo muy bien, todo empezó a cambiar cuando un día a la edad de 8 años llegue a casa y espere a que mi padre entrara por la puerta del salón junto a mi madre, ya que siempre volvían juntos del trabajo que les quedaba cerca, mi madre trabaja en una peluquería y mi padre era mecánico. Pues ese día yo esperaba en la puerta y solo apareció mi madre y más tarde de lo normal  y yo pues le pregunté por mi padre ya que era extraño y me dijo que él no iba a volver que tuvo un problema con el coche y que nadie pudo hacer nada.

Veía que empezaban a salir algunas lágrimas de sus ojos y yo deje un beso en su frente y le di la mano en señal de apoyo, pobrecito, que mal lo tuvo que haber pasado en ese momento. Paro un momento y continuo

Hugo: Yo lo pase fatal durante un tiempo, no quería comer, ni hablar con nadie, ni salir a jugar. Estuve a punto de contraer una enfermedad por la falta de alimento y ahí conocí a un chico que se llama Oscar, cuando estábamos en la clínica estábamos en la misma situación pero él ya estaba más avanzado, es decir que ya estaba superando la enfermedad y yo lo veía a él como un ejemplo a seguir y empecé a comer otra vez, en el hospital me pasaba los días enteros hablando con él le contaba cosas y jugábamos todo el rato, él era unos años más que yo y cuando le dieron el alta venía a verme todos los días, para mi era el gran ejemplo de lo que es el esfuerzo por salvar tu vida. Él me motivaba a estar bien y ver a mi madre sonreír porque yo estaba bien me daba ese subidón también. Luego me centre en la música y el en el mundo del cine, él tuvo que ir a Nueva York a hacer unas películas y yo me vine aquí a Madrid con el gran apoyo económico de mi madre además de becas porque tuve las mejores notas y nos distanciamos un poco, la verdad es que me acuerdo muchísimo de él y me encantaría volver a verle y pues hasta día de hoy que me paso lo de Anaju y ahora pues tú has aparecido en mi vida.
Eva: Jo Hugo, tú vida no ha sido nada fácil, siento muchísimo lo de tu padre. Y en cuanto a lo de Oscar seguro que él también se acuerda de ti y algún día podréis volver a veros.
Hugo: Y tú Eva, ¿como fue tu infancia?
Eva: Pues al igual que la tuya nada fácil, yo era una niña súper feliz y creía que todo iba bien pero resultó que no, a los 6 años mis padres se divorciaron y yo iba cada finde semana a verle, a los 13 años pues mi madre descubrió que mi padre había conocido a otra mujer y que iban a formar una familia, mi madre entró en depresión, pase un año entero sin verle por no dejar sola a mi madre. A los 16 yo seguía llenado a verle y eso a mi madre le molestaba. Ese año mi padre decidió invitarme a su boda con esta mujer, mi madre ni aceptaba que yo fuera, pero yo insistí y fui, desde ese día dejó de apoyarme en lo que hacía y solo me bajaba la moral, yo deje mis estudios y no hacía nada, en clase pasaba de todo y bueno ese año lo mejor que me paso fue conocer a mi amiga Laura, ella me hizo abrir los ojos y ver que si yo solita no tiraba de mí nadie lo iba a hacer y empecé a recuperar todo, mis notas subieron y salí con unas de las mejores notas por eso estoy aquí, no he hablado con mi madre desde que vine aquí, el último día quise dejar las cosas en paz para que todo estuviera bien entre nosotras pero no fue posible ella empezó a decirme que yo era como mi madre que cada día estaba con uno diferente y bueno nos despedimos de mala manera y bueno lo de Rafa pues ya lo sabes.

Hugo: Al parecer los dos tenemos ese ángel que apareció en el momento adecuado para mostrarnos la salida y hacer que nos centremos en lo que realmente importa, vivir nuestra vida. Mi primer ángel fue Oscar, pero ahora lo has sido tú por sacarme en el vacío en el que estaba después de lo de mi ex. Gracias Eva por tanto en tan poco tiempo.
Eva: Gracias a ti siempre por haberme cuidado desde el primer día, te quiero Hugo
Hugo: Te quiero Eva
Nos fundimos en un beso muy tierno y sincero. Después decidimos comer entre risas dejando un poco al lado todo lo que habíamos vivido, él me enseñó algunas fotos de Oscar en películas, a mí que me encantaba el cine y el teatro me parecían súper bonitas. Yo le enseñé fotos de Laura e incluso hicimos una videollamada  y se lo presenté, ella como no, le pregunto que si era mi novio pero decidimos no decir nada aún, al parecer se cayeron muy bien
Eva: Igual si algún día vienes a Galicia conmigo te la puedo presentar
Hugo: Me tendrás que enseñar Galicia ¿no?
Eva: Claro que si
Hugo: Entonces la conoceré
Seguimos entre risas hasta que dieron las 19:00 y volvimos a casa. Sam y Flavio estaban en casa así que nos pusimos una peli oara ver los cuatro y cenamos unas pizzas que pedimos, nos fuimos a dormir temprano cada uno en su casa ya que mañana iba a ser un día bastante largo e intenso.

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PUES AQUÍ TENÉIS OTRO CAPÍTULO, YA SE HAN SINCERADO SOBRE SU VIDA VEREMOS QUE LES DEPARA EL PRIMER DÍA DE CLASES
ESPERO QUE LOS ESTÉIS DISFRUTANDO TANTO COMO YO AL ESCRIBIRLOS
GRACIAS POR EL APOYO💜🤍

SIEMPRE TÚ (EVUGO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora