DIANA

Un día como hoy un lunes te conocí.

Desde el primer momento que te vi sentí algo extraño en mí que no sabía que era, con el paso de los días me fui dando cuenta de que lo que en verdad siento por ti, es un gran cariño y amor el cual hace tiempo que no siento por nadie.

se que apenas te conozco pero con el paso de los días cada día me enamoro más de tí... te quiero demasiado y nunca me cansar de decírtelo, sabes se que tu aun no me tienes confianza pero la mera verdad quisiera que la tuvieras, jamás te haría daño, sobre todo con lo bella y hermosa que eres, Diana cada vez que pronuncio, pienso o escribo tu nombre me entra una gran emoción y siento que vuelo hasta el cielo. hace unos meses solo quería que mi vida acabara pronto, pero por algo dios quiso que te conociera. se que no soy guapo y bello ni la persona más bella del mundo pero quiero que sepas que te quiero. son las 1:45 am y no dejo de pensar en cada momento en ti.

siento que mi vida se me acaba si no te veo, cuando llega viernes  es uno de los días más tristes para mí, ¿porque?, por que no te veo y te extraño demasiado que quisiera que pasen rápido los días para poder verte de nuevo.

Se que no somos nada, pero en mi interior hay una persona que te aprecia y sabe que algún día podre estar a tu lado y poder hacerte más feliz de lo que eres ahora, sabes Diana eres una persona maravillosa, bonita, alegre y muy divertida y por eso te considero una princesa que le pertenece mi corazón.

Me enamoré, siento latir mi corazón ante ti, la belleza de un sueño casi es una realidad eres esa dulce estrella que ahora ilumina mi camino la que siempre espere y nunca encontré.

Te conocí una mañana gris para mí y desde entonces no te he podido olvidar, son tus bellos ojos, los que contemplo en mis tardes cuando los imagino viendome.

Tu sonrisa ahhh... que hermosa sonrisa que le da cuerda a mi corazón, es esa máica sonrisa la dueña de mi voz la fuerza que me hace seguir en pie.

Tu voz dulce cariño mío, la voz de una princesa, cuando me hablas siento que la maldad que llevo dentro se desvanece, como si de algún tranquilizante se tratara, tu cabello, tu bella cabellera, hilos finos de oro teñido por ángeles tejidos entre si por la dulzura de un niño radiante como un hermoso azabache pulido. Tu mágica mirada y tus bellos y hermosos ojos radiantes sin comparación alguna y tan únicos como solos y una esperanza la que por ti me habita. El hablar contigo me hace sudar y mis manos empiezan a temblar como si de un desorden mental se tratase, tiemblo, se me borra la visión y hasta llego a tartamudear y lueo me doy cuenta que enamorado de ti, he estado todo este tiempo.