Ambos comenzaron a planear como vencer al monstruo, buscaron ramas y piedras para transformarlas en armas; comenzó a anochecer y ninguno de los dos tenía algún refugio donde pasar la noche.
Comenzaron a caminar sin rumbo fijo y de pronto encontraron una cabaña en medio del bosque, a simple vista parecía abandonada pero cuando iban acercándose pudieron notar que en el interior se encontraba un viejecillo; Mike comenzó a recordar a aquel hombre que encontró cerca de la represa de agua, el hombre de aspecto rudo quería entrar a aquella cabaña pero noto que cuando Mike vio a aquel viejecillo se llenó de temor.
Decidieron seguir caminando y sin darse cuenta ya había amanecido, pensaron que por la luz del día el monstruo no se les iba a aparecer, así que se sentaron cerca de un árbol para poder descansar ya que habían tenido una larga noche; para poder estar a salvo ingeniaron un plan este consistía en que mientras uno dormía el otro vigilaba.
Pero como estaban muy cansados sin darse cuenta ambos quedaron profundamente dormidos como si de un hechizo se tratara. Un estruendo hizo que ambos saltaran de miedo, era el monstruo acercándose hacia ellos.
Estaban helados del miedo y comenzaron a correr desesperadamente, una espesa niebla comenzó a separar los caminos de ambos y después de tanto correr se dieron cuenta que estaban muy lejos el uno del otro. Siguió caminando ya que el miedo que tenía no lo dejaba tranquilo, su estómago rugía de tanta hambre; buscaba algún árbol con frutos para poder saciar su hambre y en su larga búsqueda no halló ningún árbol solo un montón de matorrales y maleza.
Pero como dice el viejo refrán "Después de la tempestad viene la calma", al pasar las horas la niebla iba pasando y la luz que el sol irradiaba hizo que a Mike le regrese el alma al cuerpo, en sus ojos se podía ver claramente como reverberaba el sol con tal intensidad que Mike solo sonrió y dijo:
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- Jamás volveré a desobedecer a mis padres.
Al final Mike se dio cuenta que todo lo que le había pasado era un sueño, sus padres lo habían encontrado dormido en aquel árbol y le contaron que habían escuchado las palabras que dijo; él estaba contento de volver a ver a sus padres y entendió que la desobediencia no trae nada bueno.
