L-O-V-E-D

Ella y él

Él era oscuridad, ella claridad.
No eran enemigos, sólo no estaban destinados a estar juntos.
Él era el villano del cuento, ella la princesa que debía ser rescatada.
No eran oponentes, pero sus papeles no congeniaban.
Él se asombraba por su dulzura y belleza delicada que ella le ofrecía incondicionalmente.
Ella amaba, admiraba y anhelaba la presencia de él.
Él un poco patán, ella loca de amor.
Cuerpos extraños que sin nada en común encajaban bien uno en el molde del otro, pero no, no eran el uno para el otro. ¿Por qué?
Simple... Ella quería "un para siempre" "el final feliz" su "cuento de hadas".
Él quería consumirla, tenerla, amarla, pero fugazmente, sólo un momento.
Ella plantada al suelo; él con sueños más grandes que su habitación, sus alas no dejaban de revolotear. Él debía estar en los cielos.
Uno debía irse, para que el otro siguiera su camino.
¿Quién lo hizo?
Bueno... Ella sigue aquí y él buscaba su ave de alas blancas que le cante al oído, que vuele a su lado y lo deje partir cuando llegue el momento.
Ella llora cada noche aferrada al olor que él dejó en su almohada. A pesar de haber sido la razón de su sonrisa por algún momento, él no lo toma en cuenta y ella sigue soñando y creyendo que él volverá y ese día las cosas serán diferentes, ese día las horas dejaran de ser tan malas.
La verdad es que él no lo hará, ella lo sabe, pero esa "mentira piadosa" hace que la vida de desamor y caminos divididos, sea menos dura.
Conocer al amor de tu vida en el momento equivocado.
Vivir juntos pero en diferentes lugares.
Sentir el calor, recordar y esperar, porque él no pudo ver la luz de sus ojos que ella regalaba a todo aquel que la rodeaba.
¿Amor y crueldad? No, simplemente dos senderos que se cruzaron y no estaba escrito así, dos vidas que no debían vivirse, una historia que no debía contarse, un secreto que no debió revelarse, una razón que no se entiende y un amor que no pude mantener en mis manos.