𝐅𝐎𝐎𝐓𝐁𝐀𝐋𝐋𝐄𝐑𝐒 :: 𝗝𝗢𝗦𝗛𝗨𝗔 𝗞𝗜𝗠𝗠𝗜𝗖𝗛

14

-Debemos hablar- Jacob sabía que notaba algo raro en mi desde mi cirugía.

-De qué quieres hablar?- cuestiono.

-Te sigues viendo con Kimmich?- interroga.

Últimamente me he estado mensajeando con Jos, otras veces nos vemos cuando salimos a hacer cada quien sus cosas, pero jamás hemos salido los dos solos desde la cirugía.

-No? Por qué preguntas?

-Nada. Solo que desde que los vi, puedo detectar que ambos se atraen, eso es verdad?- se acerca amenazadoramente -Será que planeas volver a engañarme?

-Ya te dije como mil veces que jamás te engañé! Y jamás lo haría!!

-Lo que sea! Pero no puedes ocultar que te sientes a gusto a un lado de él!!

-Como no me voy a sentir cómoda con él?!! Si es el único que muestra verdadero interés en mi!! No como tú que yo no te importo!!

-Carajo! Me importas!! Por eso no quiero perderte!!! Por qué crees que soy tan sobreprotector contigo?!! Te quiero solo para mi!!!- ahora sonaba más enfadado.

-Me quieres manipular, quisiste decir- iba a abrazarme, pero lo empujo.

Este no se deja y me toma de mi brazo lo más fuerte posible, yo me quejo del dolor -No quieras hacerte la víctima, Andrea Elizabeth Herrera Rodríguez. Que tú también te has salido con la tuya. O qué? Debo recordarte aquella cita que tuvimos en Acapulco?- me amenaza y me lanza al suelo. -Tu eres mía, Andrea- estaba dispuesto a hacer de las suyas, pero lo pateo en sus huevos y este retrocede.

-Ya! Me tienes hasta la madre!!! Me puedes ofender, manipular, y golpear, pero jamás me vas a violar!! Hijo de tu puta madre!!!- me defiendo.

Jacob se sorprende de cómo le he gritado -Ahh! Con que te haces la fuerte, ehh? Pues no será suficiente!- me toma del cabello para levantarme y empieza a romper mi top que traía.

-Quítate a la verga, pendejo- lo empujo hacia el refri y aprovecho para tomar el cuchillo más cerca que tenga. -No tengo miedo de usarla.

Jacob esboza una sonrisa malvada -Ya me acostumbré a eso- se levanta su camisa y deja ver su torso aún con las cicatrices que le provoqué aquella noche en Acapulco, pues le lancé trozos de un plato. -Si tú piensas demandarme, también lo haré yo!

-Eso fue defensa personal. En cambio tu- agarro la manguera del fregadero y empiezo a mojarme para dejar que el maquillaje se desvanezca por completo y deje ver mis moretones de mis brazos, abdomen y cuello -Solo lo hacías por placer- y la pelea acaba.

Joshua

-Amor? Con quien te la pasas hablando?- Lina y yo estábamos acostados en la cama, ella viendo algo en su computadora y yo mirando la tele.

-Disculpa?- pregunto confundido.

-Puedo notar que cada que estas en el celular, sonríes y es una sonrisa de que algo te está gustando cada vez más- su voz se pone de modo detective.

-Qué no puedo sonreír cuando mis amigos suben cualquier tontería?- me hago el tonto pero al parecer ella lo notó.

-Esa no es una de esas sonrisas divertidas, es más como si estuvieras teniendo un buen tiempo con alguien y poco a poco te estás encariñando de ese alguien- Lina era lista.

-Bien. He estado hablando con Andrea, últimamente no se ha estado sintiendo bien. Y lo único que quiero es protegerla- confieso.

-Los mexicanos se saben cuidar y resolver sus problemas por ellos mismo, Andrea no es la excusa- Lina hablaba como si le cayera mal.

-Por qué no te agrada?

-Por qué no me agrada? Gracias a ella, dejas de prestarme atención! Tú mismo lo dijiste! Te preocupas por ella mas que de mi!!! Y si!!! Estoy celosa porque platicas más con Herrera que conmigo!!!- ella hacía movimientos bruscos provocando que tire su computadora.

Tenía razón. Según ella la había elegido, pero quizá solo mis palabras la habían elegido a ella. Mi mente y corazón decidían por alguien más.

-Dime algo, Joshua. Te gusta Herrera?- pregunta con temor.

Dude en responder, ni yo estaba seguro de mis sentimientos, Lina había estado conmigo por casi 4 años, Andrea apenas y la conozco, pero ya siento una atracción diferente a ella, y sé que ella también, solo que es muy fiel a Jacob a pesar de lo horrible que es con ella.

Lina no era Andrea. Ese era el problema.

Miro fijamente a Lina por los ojos para confesarle -Lo siento, Lina.

Ella desvía la mirada con ojos llorosos -Bien. Si eso es lo que sientes, yo no seré un obstáculo más para ti- ella se levanta de la cama y sale por la puerta.

Por tu culpa, Andrea Herrera!