¿Y QUE SOMOS?

Adios, bitch.

Ella estaba muy mal, había terminado recientemente una relación de seis años y no pasaba por un buen momento.

Sin autoestima, sin ganas de nada, sintiéndose horrible y deseando adelgazar los kilos de más que engordó con su ex, se sentía un león marino.

Un día se pesó y se dio cuenta de que había perdido seis kilos sin hacer nada, bueno si, al no tener ganas de nada tampoco las tenía para comer.

Su autoestima subió un poco y por primera vez después de muchísimo tiempo se veía bien, casi guapa.
Además ella era rubia y se tiñó de morado, quería un cambio radical, y vaya que si lo consiguió.

Comenzó a salir más, a ser más sociable, a no querer estar todo el día en casa, conocer gente nueva, vaya, lo normal. Decidió que no quería estar sola, y que por muy mal que le haya tratado el amor no puede vivir sin sentirlo de nuevo, necesitaba conocer a un chico nuevo que le hiciera soñar y sentir esas mariposas nuevamente, que bueno, más que mariposas eran dinosaurios.

Así lo hizo, se abrió un perfil en una app de citas, colgó algunas fotos y puso una descripción bastante peculiar, si, ya se que queréis saber lo que puso, aquí os lo dejo "no quiero ver nepes ni busco relaciones esporádicas, tampoco voy a pasarte fotos comprometedoras si quieres ver algo así, vete a pornhub. Sólo busco a alguien que quiera sentir al igual que yo, cosas bonitas, que aprendamos el uno del otro y si nace, enamorarnos como locos".

Conoció a muchos chicos, pero pocos en persona, casi todos iban a lo mismo de siempre, polvo y si te he visto no me acuerdo, pero ella no quería eso, así que sus posibilidades de redujeron bastante.

¡Vaya! ¿Pero quién es ese chico? Parecia que había encontrado al chico ideal, era tan increíble que parecía mentira, hablaban todos los días, compartían su día a día por mensajes, parecía que todo iba sobre ruedas, hasta que llegó el gran momento de conocerse en persona,  ¡Que nervios!