Viaje por el Atlántico

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Estaba en la ventana de mi camarote leyendo las interminables cartas que mi madre escribió antes de mi partida, no paraba de repetir que le debía escribir a mi prometida Monica, ella se había quedado en Boston puesto que sus padres decían que las mujeres no deberían jamás viajar tan lejos de su hogar, realmente no lo entiendo, Escocia solo estaba a 40 días. Para ser sincero estoy emocionado que en el tiempo que nos quedaremos en el internado Rhoughecar no estará Monica molestándome y pidiendo mi atención en todo momento, no es que no la quiero ni nada por el estilo pero, sucede que no estoy muy seguro de que ella sea el "amor de mi vida", como lo dice mi madre, yo sé que mi compromiso con ella es nada más para que mi familia finalmente logre el estatus social que siempre a deseado y mi deber como hijo es lograr que mis padres estén orgullosos de mi, cosa que realmente no me emociona mucho.
Salí y me acerque a la proa del barco para escribirle una carta a Monica y otra a mis padres, me parecía un poco innecesario que mi madre me obligara a escribirles cada semana, de igual manera las cartas podría enviarlas solamente cuando llegue a mi destino y por el momento solo faltan veinte días para arribar a Escocia. No soy muy bueno para expresar mis sentimientos, muchos pueden decir que soy un poco tímido, pero creo que cuando escribo entro en un mundo donde no le temo a nada ni nadie, pero debo de aclarar que escribirle a mi prometida es un poco intimidante.
Cuando terminé de escribir mis cartas, escuché unos pasos pesados, era mi mejor amigo Johnstone, era un hombre grande pero por alguna razón que no logró entender, todas nuestras compañeras están enamoradas de él, la mayoría sueña con casarse con John.
— ¿Qué haces, de verdad le vas a seguir escribiendo a Mónica?, amigo este viaje es para que por una vez en tu vida te olvides de tus obligaciones, disfruta del momento.
— Para ti es muy fácil, tus padres no dependen de tus acciones. Si quieres te puedes ir dos años y tus padres nada más te llenarían de dinero.
— Si entiendo tu situación, pero no está Monica, pásalo bien, disfruta conmigo. ¿Imaginas a todas las hermosas escocesas que vamos a conocer?.
— ¿Para que quieres escocesas si en Boston tienes como a cien mujeres muriendo por ti?.
En ese momento el capitán del barco nos interrumpió con su timbre, el que indicaba que debíamos ir a nuestros camarotes a dormir, aunque estuviésemos de viaje, nuestra escuela era muy estricta, al igual que respetada. Nos dirigíamos hacia Escocia a un internado mixto llamado Rhoughecar, cada tres años los estudiantes de Boston partimos a Escocia para pasar dos meses ahí, nuestro director dice que es para un intercambio cultural o algo así, pero mi única razón por la cuál quería venir era para pasar un tiempo sin mi madre diciéndome que hacer todo el tiempo y dejar de ver a mi padre enojado en todo momento, además de alejarme de Monica un tiempo, yo la amo pero tanto tiempo juntos arruina nuestra relación.
Bajamos de cubierta y entramos al ala de los hombres, entré con Jhon a nuestro camarote, el número once y nos quedamos hablando acerca de todas las mujeres que Jhon iba a lograr enamorar y todos los corazones que rompería en cuestión de dos meses.

Pasó Jack, él nos despierta con un horrible sonido de trompeta que nos indicaba que debíamos despertar y alistarnos para empezar nuestro día, que consistía en clases hasta que el sol se ocultara. Me puse mi camiseta, mi chaqueta y mis pantalones, cuando me estaba amarrando los zapatos un papel se deslizó por debajo de la puerta, lo tomé y por un momento pensé que era para Jhon, pero decía mi nombre entonces decidí abrirlo.
Para: Newt Brown
Querido Newt, yo entiendo que en estos momentos estas comprometido con una bella mujer en Boston, nuestra compañera, Monica, pero ella no está aquí y creo que estas muy solo, ¿te parecería que pasáramos tiempo juntos?. No quiero que esto suene como una insinuación pero si quieres así la puedes interpretar. Con amor, Lucy.
Esta era la quinta nota que recibía y creo qué tal vez una de las razones las cuáles las mujeres me estaban empezando a notar era debido a que cuando cumplí los 17 años decidí que mi aspecto físico iba a cambiar, por lo que empecé a ejercitarme, yo no veía mucho cambio en mi pero esta mañana cuando abotoné mi camisa sentí que mis brazos estaban un tanto apretados al igual que mis piernas, también creo que el viaje me ha ayudado, estoy más bronceado y resaltan mis ojos color avellana, mi pelo tomó un tono un dorado y según mis compañeras me veo bastante atractivo, pero eso no me interesa, yo ya tengo un compromiso con mi queridísima Monica.

Amor en Escocia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora