~Kim Tae Hyung....lo prometiste...~

~1~

Hace mucho tiempo atrás había una princesa la cual buscaba a su príncipe azu-

-Mierda ¿porque todas las historias son así?- hablo la joven Hee-sook tirando el libro al césped de aquél campus
-Jaja pues en tu caso no es así, por lo que se puede ver- hablo el peli-negro de su compañero
-Callate Min Yoon Gi, y para que sepas la vida no es una historia-

Sonó la campana la cual anunciaba que el receso había terminado

-¿vas a entrar?- preguntó
-Tengo que, ayer le marcaron a mi mamá diciéndole que en las últimas semanas no he entrado a clases-

Después de lo que Hee-sook dijo ninguno volvió a hablar y empezaron a caminar hacia el salón lo cual era la mejor opción; ya había muchos problemas en la familia de Hee-sook como para agregarle el echo de que no ha estado entrando a clases.

Las horas pasaban lento Hee-sook no presto ni la más mínima atención a clases; se volvió a escuchar el timbre más esta vez anunciando que su última clase ya había acabado, al igual que su día en la escuela...era momento de ir a casa.

La joven junto con su compañero Min Yoon Gi se encaminaron hacia las afueras de la escuela.

-Hey ¿qué tienes? Ya vamos a mitad del camino y no has hablado- comentó el acompañante de la joven
-Nada, solo no quiero llegar a casa- comentó ella esta vez
-..Por tu madre ¿cierto?-
-Si..por mi madre- susurró Hee

El joven decidió quedarse callado y no hacer ni un comentario más, ya que conociendo a Hee-sook si llegaba a decir algo más podrían salir peleados o enojados en ese mismo instante.
Una cuadra antes de llegar la joven se detuvo, cuando su compañero se dio cuenta de aquello dio la media vuelta haciendo que quedaran frente a frente. La "adolescente" se encontraba con la cabeza agachada; murmuró algo y gracias a la cercanía entre ellos dos el pudo escuchar lo que dijo.

-No quiero llegar a casa- murmuró
-Lose- susurró el joven mientras acariciaba la mejilla de la pequeña Hee-sook

Los dos hablaban en un tono bajo lo cual hizo que la gente que se encontraba a su alrededor las miraran al mismo tiempo con una pisca de rareza y melancolía.

-Vamos- comentó el mayor
-¿A donde?-
-A mi casa-

Hee-sook le miro sorprendida ya que normalmente era ella la que llegaba de imprevisto a casa de su amigo, era muy raro que él la invitara por gusto propio.

-¿Enserio?..-
-Si, aparte no sería la primera vez que vas a mi casa ¿a que le temes?-
-No a n-nada, solo que ya sabes tu mamá y tu hermanastro- la joven tartamudeaba
-Oh vamos, mi madre te ama y mi hermanastro..no te preocupes no te molestara-
-De acuerdo, vamos-

Asi fue como los dos emprendieron camino hacia la casa de él dejando de lado la casa de Hee-sook.