Ladrón de sueños

Sensaciones

Ya pasaron muchas noches desde que me dijiste que sí, fuimos.
¡Fuimos juntos a tomar un helado! y yo pagué.
Me siento orgulloso, se me infla el pecho, tanto que me cuesta respirar.
Pero está bien, porque después de que te manchaste con crema del cielo tuve el coraje de agarrarte la mano.
¡Sensación irrepetible!
Te sentí más cerca que nunca, más lindo que nunca y solo para mí.
Nunca voy a olvidar esa noche.
Nunca te voy a olvidar, creo que esto es amor.
Pensé que ibas a salir corriendo cuando, desprevenidamente, con todo el miedo del mundo y el cuidado del mundo, fui escalando.
Dedo por dedo, me tomé el tiempo de conocer cada detalle de la palma de tu hermosa mano.
Mientras caminábamos la eterna cuadra, a cada paso, me costaba cada vez más respirar.
¡Qué lindo que nuestras pulsaciones se hicieron una!
No llovió, no hubieron fuegos artificiales, tampoco música y mucho menos gente admirando nuestra relación florecer.
No hacia falta, fue el momento más puro de expresión.
Solamente éramos dos almas divagando en una calle, jugando a ser amantes inmortales.
Poco nos importaron las limitaciones, fuimos un solo corazón por un ratito.