Capitulo 2

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Han pasado unos cuantos días desde que me encontré con la chica de los labios y la profesora, en un cruce de palabras supe que la "chica de los labios" se llama Kotoka, o al menos ese es su apellido, termino de comer mi almuerzo y me pongo de pie estirando me para así caminar al salón de computación, el aire era más helado que ayer, pero personalmente no me complicaba mucho, y como siempre debía mantener mi sombrero haciendo que le llegue sombra a mi rostro, me gustaría poder deshacerme de esta enfermedad para poder disfrutar tranquilo.

-¡Hey Koichi!- A lo lejos se escuchaba una gentil voz, solamente escuchándola pude saber que se trataba de Kotoko, cada vez que la veo debo evitar distraerme o dire otra cosa indebida.

-Oh oh Hola Kotoko, ¿como a estado tu dia?- Me detenía dando media vuelta para así mirarla- Te ves bien con ese nuevo peinado-(y si, si se veía bien, esa trenza grande en el final de su cabello dirigiéndose por su hombro derecho, pero sus labios seguían siendo los más llamativos a mi parecer).

Nos preguntamos una que otra cosa y despues volvimos a retomar el camino hacia el salón de computación, para suerte la mia, nos quedamos en vernos al dia siguiente, no se si sera una especie de cita pero yo creo que si, me debo preparar muy bien para mañana. En el trayecto nos topamos con la profesora Avery, con verla, tuve un repentino dolor de cabeza fuerte pero muy corto.(Q-Que mierda fue eso?... Ugh.... de seguro estoy fantaseando con los juegos de nuevo.... debo dejarlos de lado). Lentamente me recomponia, escuchaba la voz de Kotoka, le respondo que estoy bien, solamente un pequeño dolor. Algo tiene esa profesora, y voy a saber el por que de este dolor y la fantasia....

Ya en el salón estaba mas tranquilo, el profesor explicaba la forma de combinar los diferentes comandos para poder programar de forma correcta, Yo solamente me centraba en tomar apuntes y probar los comandos en el momento desde el computador. Kotoko estaba a unos cuantos metros mio, estaba tomando apuntes y pasaba su dedo indice de la mano izquierda por entremedio de su cabello, nuevamente, mi mirada se fue de forma lenta hacia sus labios, Desvio la mirada de forma lenta centrándome en lo que decia el profesor.

Recuerdos de una mente confusaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora