𝙈𝙊𝙉𝙎𝙏𝙀𝙍 ☁︎ 𝖸.𝖬

CAPITULO 2.

—Bueno, déjame aquí, me iré en mi motocicleta— habló Yoongi haciéndole señas a su hermano de que lo dejara en una casa de color marrón.

—Esta bien, llega temprano a casa— Namjoon se paró en la puerta. Y arrancó el carro de nuevo para dirigirse a su trabajo.

Cuando el carro se había marchado, yoongi dio un largo suspiro, había llegado a casa de su mejor amigo, Jung Ho Seok, uno de los narcotraficantes más buscados de todo Corea del Sur, ¿Por qué se habían vuelto mejores amigos?, por el simple hecho de que Yoongi salvó su vida de que fuera a la cárcel.

—Espero que el idiota se encuentre en casa— dijo Yoongi en un susurro, pues odiaba que lo hicieran esperar. Tocó el timbre de la puerta color caoba hecha de madera fina.

Tocó la sexta vez, ya estaba harto de que había esperado más de 1 hora y nadie respondía a sus toquidos, estaba a punto de irse cuándo vio que estaban abriendo la puerta, y cuando fue abierta, estaba allí su mejor amigo, vestido de cuero y con su color rojo, todos esos colores le iban bien a su menor.

—Lo siento Hyung, me quedé dormido y hasta apenas escuché los toquidos— bostezó Hoseok. Sabia que su mayor estaba cansado de haber esperado tanto. —Pasa—

Yoongi entro y vio el cambio que había hecho Hoseok en su departamento, quedaba muy bien la remodelación.

—¿Te gusta Hyung?— preguntó el menor, haciéndole señas a Yoongi de que se sentará en los sillones.

—Si Hoseok, se ve muy linda la casa, a como estaba.— se sentó en el sillón de piel. Iba a sudar mucho de las piernas —Vengo por mi motocicleta, me iré con mi hermano a su casa, ya sabes, para no tener problemas—

—¡Oh! Claro Yoongi, toma las llaves de tu moto, están colgadas donde las dejaste— señaló al perchero que estaba junto a la puerta principal.

El mayor fue por las llaves y de dirigió a la cochera, donde se encontraba su preciosura de moto (Harley), la había extrañado todos esos meses que había estado lejos de casa y de Hoseok. Subió a su motocicleta, la arrancó, sentía que volvía su ser a el de nuevo.

Los dos amigos se despidieron y Yoongi se fue con su motocicleta.

Estaba atascado donde se encontraba Yoongi, si, se había metido en el tráfico y ahora no sabía cómo salirse, haci que mejor espero a que avanzara los carros, y vio una limosina color negra que tenía los cristales abajo y salía una mano muy pequeña, el peliverde comenzó a avanzar un poco más para ver quién iba en esa cosa tan elegante, poco a poco se acercaba hacia la ventana que estaba abierta, pero dejo de avanzar cuando vio que un chico asomaba su cabeza por la ventana abierta, estaba maravillado por la hermosura que había visto, piel bronceada, cabello de color rosa, labios abultados, era la escultura más hermosa que habían hecho los mismísimos angeles, aún no avanzaba ningún carro, haci que avanzó un poco más para poder hablar con el chico.

—¡Hey!— gritó Yoongi hacia el chico que le estaba encantando. —¡Hey feo!— volvió a gritar. El pelirosa volteó a ver hacia Yoongi, pensó que no me estaba hablando a el.

—¡Si tú feo!— volvió a gritar Yoongi desde donde estaba.

—¡Mira a quién le dices feo, estúpido!— grito el pelirosa hacia Yoongi. Y le hizo una seña con su mano, nada agradable por supuesto.

—¡Somos iguales precioso!— respondió Yoongi con una enorme sonrisa.

Jimin metió su cabeza y le subió a su vidrio, nunca pensó que le dirían eso mientras que estuviera parada en el tráfico, obviamente iba a llegar tarde a su primer reso en la capilla

—Estupido— bufo Jimin por lo que había pasado. Por primera vez un chico le llamaba la atención, el no era bisexual o homosexual, era normal hasta que vio ese pálido con cabello verde y ojos de gato, no era normal, por supuesto que no.
No volvió a asomar su cabeza, y los carros avanzaban un poco mas rápido, pero escucho que tocaban su vidrio, el sin cuidado de quien podría ser, lo bajo, y se encontro con la cara de su acosante.

—Para que veas que nadie olvida a Agust D, pequeño— Yoongi se acerco a Jimin y roso sus labios con los de el menor, apenas habían pasado unos segundos, cuando Jimin empujó a Yoongi haciendo que se tambale sobre su moto.

—¡Estúpido!— dijo Jimin subiendo su vidrio y lo mejor de todo es que ya estaba despejada la carretera y el chófer había arrancado.

Después de 15 minutos había llegado a su escuela, se despidió de Choi San, y se encontraba su amigo, Taehyung, esperándolo como siempre.

—¿Por qué tan tarde Minnie?— saludó de beso a su mayor. No había entrado a su primer reso gracias a la culpa del tráfico.

—Habia tráfico— dijo Jimin y recordó lo que había pasado con el chico de tez blanca. Y sus mejillas se tornaron de color rosa, haciendo que se las tapara con sus manitas pequeñas.

—Tu traes otra cosa pero, está bien, no preguntaré nada— dijo Tae jalando del brazo de su hyung —ahora andando que hoy nos espera tantas cosas.—

Jimin no escuchaba las palabras de su amigo, pues estaba pensando en el beso que se había dado con "Agust D", le sonaba el nombre pero no recordaba quien o donde lo había escuchado, haci que era mejor que se olvidará  del chico y por supuesto de su beso, él creía que no volvería a verlo.

O eso pensaba el pequeño Jimin.