Parte 1

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—Kookie —hablo bajo, esbozando una sonrisa cuando este lo miro

—¿si Hyung? —pregunto observando al más bajito

—¿puedes... dormir conmigo hoy? —pidió rascándose la nuca señal de que estaba nervioso. Él no se comportaba así a menudo, generalmente era Jungkook quien tomaba la iniciativa, a pesar de solo dijo:

—claro que si hyung— le sonrió con ternura.

Ya en la cama del mayor y ambos con su pijama puesta, se recostaron de forma que ambos se miraban. Yoongi se acercó a el maknae y hundió su cara en el gran pecho de este inhalando su perfume y suspirando pesadamente. Jungkook envolvió el pequeño cuerpo de su hyung con sus fuertes brazos.

—estas bastante mimoso hoy Yoongi— se burló del frio muchacho dejando un casto beso en su cabello —¿es un día especial o quieres pedirme algo? —acaricio los suaves mechones.

—¿porque tiene que haber una razón? —pregunto sacando su cara del pecho ajeno­— ¿no puedo solo ser cariñoso con mi Kookie de vez en cuando? —lo observo con ojitos brillantes y un pequeño puchero en sus labios

Eso sí era raro de él; ¿pucheros?, Sonrió mostrando sus dientes enternecido por la imagen— claro que si bebé, solo que es raro de ti, pero eres encantador cuando lo haces —dijo llevando su mano a su mejilla y dando suaves caricias.

El más bajo sonrió ante la acción —siendo sincero Kookie— lo observo por un rato cambiando su semblante a uno más serio —si quiero pedirte algo

—¿Qué es cariño?,¿Qué quieres?

—un beso— susurro

Jungkook sonrió e inmediatamente dirigió su mano al mentón de su pequeño hyung, se acercó lentamente a su rostro rozando sus labios con los del mayor, lo miro a sus adorables ojitos gatunos encantado por la vista —te amo —susurro antes de juntarse por completo tomando tiernamente la boca del mayor con la suya.

Crearon un vaivén con sus bocas saboreándose mutuamente, tiernamente. Jungkook paso su lengua por los rosados y finos labios de Yoongi y saboreo su interior cuando este abrió su dulce boca. Probó cada parte de su amado, cada dulce y deliciosa esquina de ese ser tan hermoso, tan bello y delicado, acaricio su mejilla y cuello como siempre hacia, abrazo y cubrió su menudo cuerpo con el suyo más esbelto, tan tiernamente como siempre.

Lo cubrió de amor y caricias dispuesto a sustraer hasta la más mínima gota de tristeza de su ser, toda esa semana, todos esos meses que lo vio a punto de derrumbarse, ahora planeaba hacerlo olvidar con toques suaves y envolviéndolo en el amor más puro que solo tenía para él, poco sabía que eso no sería suficiente para unir los pedazos de esa alma rota.

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El aire que golpeaba su rostro volvió sus mejillas y la punta de su nariz de un tono carmesí, casi no sentía sus manos que agarraban con fuerza la barandilla de metal demasiado fría debido a el congelador viento de la noche, aun así, sus palmas se empapaban de sudor y sentía la bruma de un día soleado en su cabeza.

Desvío su mirada de los autos que pasaban bajo el puente para ver a su alrededor, salvo una persona que pasaba por ahí a pasos apresurados no había nadie más, lógico quien estaría afuera a las tres de la madrugada.

Miro al frente notando lo empañado que estaban sus ojos por las lágrimas no derramadas. Pestañeo, una gota rodo por su helada mejilla y suspiro.

Esta era la decisión correcta, ya no aguantaba la pesadez de su cuerpo y mente, no soportaba el hecho de mentirle a los chicos cada vez que le preguntaban si estaba bien, mucho menos mentirle a Jungkook.

—Jungkook— susurro para sí mismo, otra lágrima cayo —perdón— dijo con la voz rota y cansada, un perdón que jamás llegaría a los oídos de su gran amor, un perdón que jamás sería aceptado.

Subió a la barandilla quedando sentado en esta y miro la gran altura bajo sus pies. Era hora de acabar con esto.

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Despertó repentinamente sintiendo la fría brisa en su cuerpo, abrió los ojos tanteando en la oscuridad, nada.

—¿Yoongi? — se sentó encendiendo la luz de la lámpara a su lado, él no estaba, en cambio una nota cuidadosamente doblada descansaba en la almohada, la tomo y la abrió.

'Jungkook, sabes que te amo verdad y siempre te amare, no importa lo que pase solo espero que puedas perdonarme —se le hiso un nudo en el estómago­— pero ya no aguanto más, quiero terminar con esto y lo haré lo más lejos posible de ustedes, no quiero que carguen con mi cuerpo muerto en su conciencia...'

Dejo el papel a un lado arrugándolo en el proceso rápidamente se incorporó temblando y agitado con un gran nudo en su garganta y ojos empañados de lágrimas. 

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Sólo quiero decir: gracias por leer y que si estas pasando por un momento similar solo habla con alguien, realmente ayuda mucho y solo ten fuerza y fe en que superaras los malos momentos.

Besos y espero les guste esta pequeña historia😘😘

Sólo un beso/KookgiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora