《Crazy In Love》Adrinette

🥀2. Él chico nuevo🥀

Ya había amanecido y la azabache justo al despertar tenía un dolor de cabeza insoportable, eso le pasaba por haber consumido tanto alcohol.

《Espero no haber cometido un error ayer, no recuerdo muy bien lo que paso y temo haber cometido una estupidez.》

Se dio la vuelta, percatándose que un chico rubio se encontraba domirdo plácidamente a su lado, como ambos estaban muy cercas la respiración del chico chocaba en el rostro de ella.

Por un momento se sintió nerviosa por esa acercanía de ese sexy chico misterioso.

Al bajar un poquito su mirada se dio cuenta que ese chico no traía camisa, luego miro hacia más abajo y después miro el cuerpo de ella que se encontraba tapado por sabana blanca delgada, al igual que el cuerpo de ese chico. Solo que a él le llegaba a la mitad de la espalda y el de ella por completo.

Temiendo lo peor, agarro la sabana y la levanto un poquito y definitivamente era lo pensaba: ella estaba desnuda, y por supuesto que también él lo estaba.

Había tenido sexo con un desconocido sexy chico.

《Oh, mierda.》

El rostro de la chica cambio su expresión a una de horror, ¿que paso ayer que ambos llegaron a esta situación?

Y de repente, vinieron pequeños fragmentos de esa noche apasionada que tuvo con ese chico ayer.

Gracias a esos fragmentos, sus mejillas se colorarón a un tono carmesí, sintiendo como tambien empezaban a arder sus mejillas.

Se paró rápidamente de la cama, y con rapidez empezó a agarrar sus pertenecías, mismas que se encontraban esparcidas por el piso junto también con las pertenecías del chico.

Con paso rápido y sintiéndose incómoda por caminar desnuda, fue directo al baño. Se vistió con mucha prisa, al terminar se observo por un momento en el espejo y acomodo su cabello alborotado por lo de anoche.

Con sus manos se apoyo en la orilla del lavamanos de aspecto lujoso, y miro hacia abajo, soltando un suspiro.

Se alejo, y abrió un poco la puerta, para ver que aún ese chico se encontraba dormido.

Suspiro aliviada al verlo aún en la cama, y se fue directo a la puerta para marcharse de ahí lo antes posible.

—¡Espera! —dijo, el chico misterioso, haciendo que la azabache parará en seco con su mano en la perilla de la puerta.

Movio su cabeza, mirando al chico desde su hombro: estaba incorporado y la delgada sabana solo tapaba sus piernas y su parte íntima, dejando ver su abdomen y sus brazos fornidos, su dorado cabello se encontraba un poco despeinado, pero aun así se veía sexy, bastante sexy.

—¿Quién eres?...Oh, lo de ayer. —dejo de hablar por incomodidad.

—Te-Tengo que irme, —sin esperar a que él dijera algo se fue, cerrando la puerta a su paso.

Al bajar se encontro a Nino en la cocina. Las escaleras estaban alado de la cocina, por eso y para su mala suerte, Nino la vio.

—Mari, pense que te habías ido antes que Alya, ella también lo penso.

—Eh, me quede dormida, es que...tome mucho y lo más problable es que haya subido y dormido en uno de tus cuatro cuartos —sonrió nerviosa.

Nino dudo por unos segundos —Oh, bueno, para la otra no tomes mucho. Que mal que no hayas conocido a mi amigo de Italia, hablo un rato con nosotros y luego se fue a la cocina, de casualidad ¿no lo viste?