-Debes ser fuerte. -Ella tosió y tomo mi mano.
De nuevo este sueño
-sigue siendo el chico amable que eres.
¿Por qué de nuevo?, ¿por qué este sueño?
-Perdón por no poder acompañarte más. -poco a poco veía como respiración era más lenta y poco a poco cerraba los ojos.
Es horrible ver morir a una persona que es tan importante en tu vida y no poder hacer nada.
No pude oír las últimas palabras de ella, tal vez fue por qué estaba llorando o simplemente mi cerebro decidió olvidarlo.
Esa tarde de julio, perdí a la persona más importante de mi vida.
Poco a poco abrí los ojos, gracias al sonido del despertador.
Otra vez ese sueño... Me di cuenta que tenía lágrimas en los ojos.
Ya se cumple un año desde que murió, me seque los ojos y me levante de la cama, me cambié rápidamente para ir a la preparatoria.
Fui al baño a lavarme el rostro, tal vez sea por ese sueño, pero al verme al espejo y ver ese mechón rojo que tengo no pude evitar sonreír al recordar cómo me lo hice.
Baje a la cocina a preparar mi desayuno y almuerzo, mientras preparaba todo me volvía a pasar por la cabeza el mismo pensamiento.
Está casa es muy grande para mí solo
Dejé salir un suspiro y seguí preparando todo.
Regularmente voy al cementerio, hoy debo ir ya que ya que se cumple un año de su partida, es raro siento como si hubiera pasado menos, todavía no asimilo su ausencia.
Al terminar, tomé mi desayuno, vi el reloj de reojo, marcaba las 7:50AM. No pude evitar dar un salto y ponerme de pie, tome un pan y me lo puse en la boca, agarre mis cosas para salir corriendo de casa con dirección a la preparatoria.
A pesar de que la preparatoria no estaba muy lejos no podría llegar en menos de 10 minutos, este era mi último año no podía fallar en nada.
Tras correr algunos minutos estaba cerca, solo pensaba que me castigaría por llegar tarde.
Seguí corriendo, pero no me percate de una chica que estaba parada en la entrada. Y al darme cuenta ambos estábamos en el suelo por el choque.
-Perdón, perdón tenía prisa, no te vi. -me levanté rápidamente y extendí mi mano para ayudar a la chica.
-No, no, discúlpame a mí. -tomó mi mano y se levantó.
Al ver su rostro me di cuenta que era mi compañera de clases.
-Hana ¿Qué haces parada en la entra?
-¿¡Ka-Kaito!? ¡Perdón! -inclinó su cabeza en forma de disculpa y dijo -Se me hizo tarde por quedarme dormida, estaba preparándome mentalmente para el castigo de la maestra.
Tenía razón en algo, la maestra daba miedo, era una mujer fría y despreocupada pero al molestarse era un demonio.
-Tienes razón, pero debemos entrar.
Hice un movimiento con mi cabeza hacia la entrada y caminamos a la puerta, la profesora estaba esperándonos ahí, estaba preparado para su sermón, pero sorpresivamente solo nos hizo una seña para entrar a lo que hicimos caso.
Ya en el salón de clases cada uno fue a su lugar, las clases habían empezado, siempre estaba atento a la clase, pero hoy no podía concentrarme, tal vez sea por el sueño o por el día que es, no lo sé.
Seguía divagando, sin darme cuenta sonó la campana del almuerzo, me sorprendió lo rápido que paso el tiempo, tomé mi comida y me fui a la azotea a comer.
Abrí la puerta que daba hacia la azotea y entré, era un buen día, cielo azul, una fresca brisa de verano, me senté en el suelo a disfrutar mi comida en paz.
Al escuchar la puerta abrirse gire mi cabeza, era Hana estaba con una extraña expresión de sonrojo.
- ¿Hana? Que inusual ¿tú no sueles almorzar en el salón?
-Si, Pero vine agradecerte por ayudarme a entrar, seguro que si no estabas ahí no habría tomado valor para entrar.
-No tienes que agradecer, los dos nos salvamos del castigo ¿no? Es lo importante.
Al escuchar mis palabras sonrió tiernamente.
-Ka-kaito... ¿Puedo almorzar contigo?
Volvía esa expresión de sonrojo, me pregunta como si yo fuera el dueño de la azotea, a veces es un poco extraña, pero es una buena persona.
-Claro. -sonreí un poco para mostrarme amigable.
Hana volvía a sonreír y se sentaba tímidamente a mi lado, aunque un poco alejada.
No hablamos mucho en todo ese tiempo que estuvimos comiendo ni al volver al salón, fue raro, pero tampoco sabía que decir.
Al terminar las clases, tome mis cosas para salir de la preparatoria, tome un tren que me dejaría cerca al cementerio.
En el transcurso me vinieron recuerdos de los años que pase con ella, las risas, los problemas, todo...También que cosas hubieran pasado si no se hubiese ido.
Bajé del tren y caminé un rato hasta llegar al cementerio, ahí había una señora mayor que vendía flores afuera del cementerio, siempre se las compro a ella cuando vengo a visitarla.
La señora tenía las flores que siempre compro preparadas.
-Ya es un año desde que empezaste a venir ¿No?
-Si. -solo respondí eso y tomé las flores.
Le agradecí que las tuviera preparadas y entre. Caminé hasta su lápida que estaba un poco al fondo del cementerio.
-Hola -me senté frente a su lápida.
-Ya se cumplió un año desde que no estás, he estado bien, gracias a las cosas que me enseñaste puedo vivir solo, aunque a veces sigo levantándome tarde, sé que te molestaba eso, lo siento.
Sentía una presión en el pecho que dolía más y más.
-Tal vez no me estás escuchando, pero si lo haces quiero que sepas que.... Te extraño.
Las lágrimas empezaron a correr por mí rostro, no sé si empezaron a caer ahora o desde que entre, solo sabía que estaban cayendo.
-Haría lo que fuera para que volvieras aquí conmigo.
Siempre pienso eso, que haría lo que fuera para traerla de regreso, a veces le rezaba a Dios para que todo esto fuera solo un mal sueño, pero la realidad es que ya no estaba y debería aceptarlo, pero no puedo.
-Si un dios me está escuchando, por favor que esto solo sea un mal sueño.
Cómo era de esperarse no paso nada, sabía que mi plegaria no sería escuchada que seria en vano pero aún así la hice tal vez solo estaba desesperado.
Me empecé a secar los ojos con mi manga, al volver a abrir los ojos me di cuenta que ya no estaba en el cementerio.
-¿Pero que..?
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KAMIGAMI NO GEMU
FantasyHace 50 años se creó una competencia donde personas eran invocadas por los dioses para participar en un juego de eliminación, este juego tendría como recompensa un deseo, el deseo que ellos quisieran, estos juegos se celebraban por casi todo el mund...