no sé cómo ponerle a esto pero es golsigma

(♡ര‿ര)

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❝No puedo detener este sentimiento.❞

El cielo está parcialmente nublado, mi estómago exige algo de comida, sin embargo, mi cuerpo no responde lo suficiente como para pararme de este sofá y dirigirme a la cocina a prepararme algo.
Sólo puedo oír el "tic toc" del reloj de pared, suspiro y después de unos segundos me dispongo a dejar el plácido sofá y el libro que estaba leyendo. Voy hacia la cocina, todo estaba arreglado pues así soy de ordenado. Reviso el refrigerador, no hay nada. Reviso las repisas de arriba, no hay nada. Reviso los cajones, horno y la mesa, oh, sorpresa, no hay nada. 

─Maldición, sólo esto me pasa a mí...

Mi estómago gruñe fuerte. Algo debo hacer, tal vez tengo que salir a comprar, ¿pero qué?

¡Pizza! No.
¡Arroz! No.
No, no, no.

─Ya sé.

Tomo un pequeño sueter, algo de dinero y una liga para mi cabello, con cuidado me hago una cola de caballo alta, unos pequeños mechones de pelo se desprendían pero no es una molestia para mí.

Salgo de mi casa y me dispongo a ir a la panaderia por unas deliciosas galletas. Pensaba ir a la cafetería que estaba a dos cuadras pero prefiero disfrutar de lo que más me gusta en casa.

Llegando a la panaderia, coloco distinto tipos de galletas dentro de una bolsa.

─Yum, yum, ya quiero comerlas junto a un café.

Chispas de chocolate, rellenos de fresa, de animalitos. ¡Es todo un paraíso de sabores!
Me acerco a la caja para que me cobren, en eso me fijo en la ventana. Oh, no, creo que tengo la peor de las suertes. Gotas y gotas empezaron a caer del cielo chocando contra el suelo e iniciando a crear charcos.

─¿Le cobro? ─escucho preguntar a la cajera.

Con mi cara de sufrimiento le doy del dinero que tengo. Estando en la entrada de la panaderia, pienso en si es buena idea ir  corriendo hacia mi casa o si simplemente esperar. Mi estómago gruñó tan fuerte que algunas personas se me quedan viendo.
Suspiro y...

─¡Ahí te voy, San Pedro!

Acelero, con mis ojos entre cerrados voy corriendo procurando no chocar con alguien, pero como la vida me odia, es lo primero que ocurre.

─Ouch. ─digo en voz baja─ Perdón por...

─Ahhh, Sigma-kun~

Abro mis ojos. Lo primero que veo es esa peculiar sonrisa, esos ojos y esa forma de vestir. Antes de decir algo, éste me abraza.

─¿Gogol? ¿Q-qué haces aquí?

¿Por qué tartamudeo?

Veo de reojo, Gogol salió de una tienda de sombreros, me fijo en él y noto como trae una bolsa.

─Vine a comprar unas cosas para mis próximos trucos de magia.

Me suelta de su abrazo y me sonrie de frente. Parece todo un espectáculo el estar viendo como caen las gotas de lluvia y su cabello, que estaba trenzado como siempre, se mojaba poco a poco.

─¿Pero tú qué haces aquí corriendo bajo la lluvia? ¡AHHH! Tu precioso pelo se está mojando.

Su mano empieza a recoger mis mechones sueltos mojados y lo colocaba detrás de mis orejas.

¿Qué es esto...?

─Vine por unas galletas, tú sabes que me gustan mucho, pero la lluvia me tomó por sorpresa.

Gogol muestra una expresión algo triste pero de un momento a otro da un pequeño salto de felicidad. Mete su mano detro su abrigo y saca un pequeño paraguas.

─¡Ta-da! Quería contarte una adivinanza pero esta lluvia empieza a empeorar.

─Gogol, ese paraguas es más apto para una sola persona.

─No importa, podemos compartirlo.

Sonrie, y yo...

¿Me sonrojo?

Odio la lluvia, pero por esta ocasión la amo un poco.

Extiende el paraguas y se acerca a mí. Estando del lado izquierdo, nos empezamos a dirigir en dirección recta. Mucha gente se va corriendo a un lugar techado, otros son precavidos y llevan una sombrilla. No sé a dónde vamos, pero me agrada la forma en la que nuestros hombros rozan.
Gogol me voltea a ver, tan sonriente como de costumbre.

¿Qué es eso que se escucha?

─Sigma-kun, puedo escuchar tu respiración, ¿no es increíble?

Claro, lo que se escucha son nuestras respiraciones cruzarse.

─Desde que llegué a este país junto a Dos-kun he aprendido muchos acertijos, ¡quiero contartelos! ─hizo una pequeña pausa. Toda mi atención está contigo, Gogol. ─ ¿Podemos ir a la cafetería? Creo que queda cerca.

Mi mente está totalmente en blanco, es como si de pronto todo se borrara de nuestro alrededor y no me importara que mi hombro izquierdo se esté mojando.
Lo podré seguir soportando.

─No sé. ─digo algo seco aunque claramente no tiene sentido lo que estoy haciendo. Espero un reacción negativa pero Gogol se ríe.

─Mejor te dejo en tu casa, creo que estás muy cansado, aparte no quiero que te enfermes.

La lluvia se empieza a detener, ojalá durara sólo un poco más.

Llegamos a mi casa, pareciera que se pasó rápido el tiempo mientras mi cabeza estaba llena de fantasías.
Gogol y yo nos detenemos en la entrada viéndonos fijamente a los ojos, puedo verme reflejado es sus ojos por lo cerca que estamos. Retira el paraguas de nuestras cabezas y lo pone de un lado.

─Gogol, gracias por traerme.

─Ah, no te preocupes, Sigma-kun. ─suspira─ Debí traer un paraguas más grande, si te enfermas ¡será totalmente mi culpa.

Dice mientra "solloza" exageradamente.

─¡No! Digo, yo fui una molestia pero...

No lo digas, no lo digas.

─¡Yo disfruté mucho pasear junto a ti! Es como si quisiera estar pegado a ti, caminando sin rumbo por todo el tiempo posible. No puedo detener este sentimiento que siento hacia ti.

Me gustaría que algo me golpeara en la cabeza en este momento y olvidar lo que acabo de decir. En desesperación empiezo a buscar mis llaves para entrar a mi casa lo más pronto posible antes de que Gogol diga algo.

─Sigma-kun...

─¿Sí?

Bajo mi vista, pero con la fuerza de sus dedos levanta mi mentón. Se acerca demasiado a mí y...

Siento como la lluvia que hay dentro de mi corazón dejara de existir y se iluminara, creando una calidez que recorre todo mi cuerpo.

¿Qué es esto?

Es un beso bajo la lluvia.

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q feo, pidoperdón si está mal redactado 😭

todo esto está inspirado en la canción de NCT 127 "Love Song":)