4. El perdón de Dios

125 3 0
                                    

EL PERDON DE DIOS

Dios quiere perdonar los pecados en concreto, no en general.
Parábola del hijo pródigo
El Hijo le pide al padre la herencia. La herencia se recibía cuando el padre moría. Es como decirle al padre: para mí estás muerto.
Vivir como un libertino.
El hijo prefiere cuidar cerdos. Para un judío los cerdos son impuros, si lo tocas tienes que hacer unos ritos de purificación. El hijo se va a un país lejano porque en Israel no hay cerdos por eso de los judíos.
Trabajaré como jornalero: trabajo a tiempo parcial (no son siervos permanentes), el hijo quiere trabajar como jornalero.
Dios actúa en nosotros como el padre de la parábola, siendo que el hijo lo ha dado por muerto. El padre toma la iniciativa para perdonar. Es como cuando pecamos, Dios nos pone en el corazón el deseo de pedir perdón.

Seguro que los siervos comentaban el hecho de que su hijo se había ido y que volvió con harapos. El padre se conmueve ante esto (igual que en la oveja perdida, que Dios sale en su búsqueda, es un Dios que llora, que está pendiente de nosotros)
El hermano mayor tenía envidia. El padre sale a hablar con él. Pero el hijo le responde eso de: "Hace tantos años que te sirvo...". El mayor dice: "ese hijo tuyo" no dice mi hermano. La envidia hace que pierdas conciencia de las relaciones, habla como si no fuera su hermano.
El padre le dice: "Todo lo mío es tuyo". El padre dice: este hermano tuyo estaba perdido y ha sido encontrado, etc.
Y el padre hace una fiesta. El cristiano hace fiesta; Cristo hizo su primer milagro en la celebración de una boda. Aunque siempre tiene que haber un sentido en la celebración, no se trata de hacer fiesta por hacer fiesta sino de celebrar algo.
Dios quiere que participemos e su alegría y de su felicidad libremente.

*Los judíos dicen que de Abraham en adelante son históricos (sí que existieron), los de antes (Noé...) no se tiene claro.

YON KIPUR (fiesta judía): "El día de la expiación" (el perdón de los pecados)
En el Antiguo Testamento la expiación de los pecados se hacía en una fiesta y se usaban dos cabras. A una la sacrificaban en el templo y con la sangre, después de hacer oraciones (para pedir el perdón de los pecados) en el templo vestidos de lino blanco (expresa pureza), rociaban la sangre sobre la gente para limpiarles los pecados.
A la otra cabra el sacerdote le impone las manos, hacen que la cabra salga del templo al desierto y le hacen morir de hambre (y si alguien la toca, queda impuro).
En este día no pueden tocar nada. Es día de penitencia. Ni comen desde el atardecer del día anterior al atardecer de ese día.
Jesús: yo soy el cordero de Dios que quita el pecado del mundo.
Nosotros, para recibir a Cristo, también tenemos que purificar nuestro corazón.
Cristo hace el papel de las dos cabras. Su sangre nos limpia de los pecados (como la primera cabra) y también carga con nuestros pecados (la segunda cabra)
-Dios preparó este lenguaje (del sacrificio y los corderos) para que entendamos la salvación a través de Jesucristo. Así los judíos convertidos podían explicarlo a los judíos no convertidos.

Conclusión: saber que Dios está siempre esperándote. Ser como el Hijo prodigo: recapacitar de tus pecados y decir: "Iré a donde mi padre..."

Como tener una vida cristiana??Donde viven las historias. Descúbrelo ahora