Viernes, 03 de marzo de 1989
Peggy Carr yacía en la cama de la Unidad de Cuidados Intensivos de un hospital ante la estupefacción de los médicos que la atendían. Todas las pruebas de laboratorio daban negativas. Sin embargo, uno de los médicos notó un pequeño detalle: a Peggy se le caía el pelo. Era un síntoma de una enfermedad poco común, una que el doctor no había visto antes. Y de ser aquella, no tenía cura conocida.
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Crimenes Imperfectos
Mystery / ThrillerInvestigaciones resueltas sobre casos y crímenes reales. Así fue cómo los resolvieron, y algunos casos marcaron un antes y un después en la ciencia forense.