~ Capítulo 3 ~

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Después de unos minutos Hipo se fue del bar, entró al auto y fue directo a su ático. Cuándo el llegó ahí él fue a su habitación se quitó el chaquete de traje y empezó a beber otra vez. Después se cansó de tomar y se tomó una ducha, eso también lo relajo después se cambio de ropa y se durmió. Lo bueno fue que mientras dormía él no tuvo ningún sueño malo ni escucho voces o visuales lo cual lo hizo descansar bien después de un largo día. El día siguiente se despertó bien si listo se dio una ducha y luego fue a cenar pero debido que tomó mucho ayer no comió mucho ahora por qué si lo hacía entonces él iba a vomitar. Después se subió en su auto con el chofer y fueron ahí fue a su empresa. Hipo llego a su oficina y empezó a trabajar. Después de unas horas él se empezó a cansarse mucho debido que él ahora tuvo mucho trabajo que hacer. Desafortunadamente eso no iba a ser la única cosa que él tenía que tratar.....

Después de un tiempo Hipo empezó a sentir algo extraño. Empezó a sentirse un poco mareado pero el ignoró lo que le estaba pasando y Siguió trabajando. Cada vez el mareo empezó a sentirse más fuerte pero Hipo siguió ignorando lo luego tomó una pastilla hasta que por fin no pudo más y se tuvo que ir temprano de su trabajo sabiendo que todavía tuvo mucho trabajo que hacer todavía. Debido a eso él agarró los papeles que necesitaba revisar y ver, Los puso en su bolsa negra para el trabajo y se fue de la empresa. Llegó a su ático lo más pronto posible le ordeno a Marisol qué la guerrera una pastilla con un vaso de agua fría y que le preparé un licuado saludable. Luego se fue a su oficina que tenía en su ático, pone sus papeles en su escritorio y luego se fue a su habitación. Marisol llegó con todo lo qué Hipo le dijo. El primero tomó la pastilla y se sentó en una silla después de unos minutos él tomó su licuado y se paró contra la enorme ventana mirando a la vista de la ciudad. También le ordenó a Marisol que nadie lo moleste para nada. Eso fue como una advertencia.

Hipo estaba en un estado de el, que si alguien le molesta el no solamente se va enojar mucho el si pondrá violento con cualquier cosa o persona que lo está molestando. Obvio que para evitar problemas Marisol hizo lo que le dijo y desde ahí nadie lo molesto. Pasó dos horas de tranquilidad nadie vino a molestar o hablar o pedir por Hipo. Y ahora Hipo se sintió un poco más relajado. Claro todavía si sentí extraño y tenía mareos pero eso ya no era tan fuerte como antes. Él se salió de su habitación, se fue a su oficina y comenzó a trabajar. Otras dos horas pasaron y todo seguía bien y calmado, Sin embargo ni nadie sabía que pronto ocurriría un desastre......

Stoick: — de repente entra en la oficina de Hipo y sierra la puerta — ¡Hipo!

Hipo: — lo mira luego mira sus papeles — ¿Ahora qué diablos quieres? Que no ves que tengo cosas que hacer.

Stoick: Yo te dije que íbamos hablar, ¿no? Pues aquí estoy.

Hipo: Si vamos hablar de tus estupideces sobre mi entonces retírate que yo tengo más cosas importantes que hacer que estar gastando mi tiempo hablando contigo.

Stoick: ¡Eres un cobarde! — pone sus manos sobre el escritorio de Hipo y las desliza, empujando sus papeles la suelo —

Hipo: — se pone de pie inmediatamente — ¡Maldito estúpido! ¡¿Qué te pasan en esos papeles eran muy importantes?!

Stoick: ¡No me llames así! ¡Soy tu padre y me tienes que respetar! Si ahora no estás tan ocupado.

Hipo: ¡Eres un idiota! — lo agarro y lo golpea en la cara haciendo que él se caiga — ¡Lárgate de aquí antes de que te vaya mas peor!

Stoick: — se levanta — ¡Yo no me voy de aquí hasta que termine de hablar contigo! ¡Así que te calmas o si no yo te calmo!

Hipo: ¿Eres un pendejo o que? Yo ya no soy un niño pequeño. Yo soy un adulto y tú ya no me puedes mandar a tu gusto.

Una nueva oportunidad para AmarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora