La cabeza de Jungwoo dolía por la jaqueca que se le había presentado horas atrás fruto del desvelo. A pesar de eso, ni siquiera pudo importarle considerando que su mente era todo un lío; los malestares eran la menor de sus preocupaciones. Pensamientos iban y venían a velocidad poco saludable, aunque estaba fuera del alcance del chico el poder controlarse cuando se trataba de retomar aquel asunto aterrador y preocupante, pero, francamente, conseguir al fin armar el rompecabezas resultaba ser el mayor alivio para la incertidumbre del joven.
Aún seguía recostado en el sofá: su cabello estaba mugroso, completamente despeinado, parecía un nido de pájaros, todo era consecuencia de locos impulsos que lo arrimaron a arrancarse una que otra hebra; por otro lado, su rostro no lucía en las mejores condiciones con las ojeras prominentes y las bolsas debajo de sus ojos. Un embrollo total.
Cualquiera que lo viese en tal estado quedaría asqueado, aún así, el sentimiento que provocaría ser espectador de tal escena sería nada más que pena. Uno no podría sentir rechazo por él, ni evitar ser delicado con una persona con el aspecto demacrado de Jungwoo, después de todo, lucir como un muerto luego de pasar toda la noche despierto no podía ser buena señal.
Daba escalofríos imaginar que, detrás de un alma damnificada y exhausta, hubiera pensamientos tan siniestros...
Estaba sumergido en su mundo y separado de la realidad, De repente, al terminar de bostezar, escuchó un lento chirrido que le crispó los vellos de sus brazos. Pronto entendió que la puerta de la habitación había sido abierta. Doyoung emergió del cuarto momentos después, sus suaves pasos sonaron fuertes en aquel silencio desolador.
Automáticamente, Jungwoo se sentó en el sillón con la espalda bien erguida mientras le ponía atención al andar del mayor, que no se había aparecido en la sala de estar todavía, lo que quería decir que había ido a la cocina probablemente para preparar el desayuno.
Por supuesto, el que su novio estuviese despierto tan pronto como el gallo cantaba anunciando un nuevo día no debía ser nada del otro mundo, excepto que Doyoung no era madrugador, nunca lo había sido y nunca lo sería. Vamos, el tipo ignoraba sus cinco alarmas con tonos ensordecedores y se levantaba dos horas más tarde, además, hacía pequeñas rabietas recién abría los ojos, acabando por caminar como un zombie rumbo al cuarto de baño para asearse, porque le era imposible espabilarse correctamente sin un chorro de agua congelada en su rostro. Doyoung odiaba las mañanas con una pasión que a veces Jungwoo no lograba entender del todo; era rutinario, y aún así no se acostumbraba, agregando que debía irse al trabajo pasadas las ocho.
En cambio, este Doyoung no rechistaba con los primeros rayos del sol y le sonreía a la ventada agradeciendo lo despejado del cielo matutino. En pocas palabras, no era para nada como lo que solía ser. Claramente confirmaba las innumerables variaciones en la personalidad de su pareja, dándole áun más motivos para creer que lo habían suplantado. Naturalmente no conservaría las mismas costumbres, aunque Jungwoo le daba crédito por ser lo suficientemente parecido como para engañarlo en un prolongado lapso de tiempo.
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Capgras ᵈᵒʷᵒᵒ
Fanfiction"Kim Jungwoo debe buscar respuestas... Para eso, ¿querrá afrontar la realidad o un producto de su imaginación?" (🎭 ) nct | dowoo: doyoung x jungwoo (🎭 ) homosexual (🎭 ) diez capítulos (🎭 ) misterio, psicológico ©EndlessDowoo