Ave fénix

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Según la mitología egipcia, el ave Fénix es en un símbolo de fuerza, de purificación, de inmortalidad y de renacimiento físico y espiritual. Todos tenemos en nosotros el poder de mejorar, de resurgir de aquello que nos hace daño. Seamos valientes.
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Tomé mis maletas y vi por última vez la casa donde crecí, era de noche y estaba huyendo. Me subí al taxi y sentí como las lágrimas bajaban sobre mi rostro, cuesta mucho dejar aquello que estás obligado a tener toda tu vida: la familia. Pero con todo la fuerza existente en mi, emprendí mi nueva vida.

El camino era tranquilo, pocos autos en las calles siendo que eran las 2:00 am. Me puse mis audífonos y me ahogué en mis pensamientos...¿Como sobreviviré siendo una persona de 17 años, recién termine la secundaria y nunca había trabajado en mi vida?

— Ya llegamos - dijo el taxista, señalando hacia fuera. Una casa de color amarillo, pequeñas ventanas y poca iluminación en las calles, tenebroso yo diría. Pagué al taxista y arrastré mi equipaje hasta el lugar que sería mi nuevo hogar. Era una casa compartida, por lo que me tocaba vivir en una habitación, habían tres personas más viviendo de la misma manera que yo.

No tenía ningún tipo de cama o mueble ya que nada era mío, así que tome un montón de ropa y la utilicé como almohada. Ese día dormí en el piso y me levante con un gran dolor de espalda.

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En la mañana, había un rico olor a desayuno. Tomé la toalla y me dirigí al baño, abrí la ducha y esperé que caliente, me iba cepillando los dientes, cuando calentó termine de limpiar mis dientes y me entré a la ducha, dejé el agua corra por mi cuerpo y de la nada empecé a llorar, la vida no significaba nada en el momento, no se que sentía y no sabía si iba a ser posible que yo sienta lindas emociones otra vez.

Cuando termine me vestí y decidí ir a la cocina, allí estaban sentados tres personas; dos chicos y una chica.

— Hola, supongo que eres la nueva inquilina, mi nombre es Uma - dijo la chica, con piel morena, hermosos ojos cafés y sonrisa ancha — ¿Cómo te llamas?

— Mi nombre es Lewa, encantada de conocerte - dije, soy una chica de tez negra, grandes ojos marrón oscuro y pelo rizado — Mi familia viene de Guinea Ecuatorial, ¿y tu de donde eres?

— Yo vengo de la India. Estos son Leo (un chico de tez clara, pelo negro y alto), viene de México y Nathan viene de Trinidad y Tobago (este chico tenía tez morena y pelo rizado).

Los chicos me saludaron y yo a ellos, me invitaron a desayunar, le di gracias a Dios en la mente ya que no tenía dinero ni sabía que iba a comer, todos fueron amables conmigo y comenzamos a hablar de la cultura de cada uno, me interesé mucho por el Caribe ya que las islas no son muy conocidas a nivel mundial y me dio mucha curiosidad, si todos se parecen a Nathan son personas que llevan el baile en la sangre, aman comer y tienen hermosas playas, me dio mucho entusiasmo conocer otras culturas que no fuera la mía. Cuando ellos se fueron al trabajo, sobró un sándwich y lo guardé para después porque no sabía si iba a conseguir de comer.

Me pase todo el día en la casa, leyendo periódicos y buscando ofertas de trabajo, preparándome para al otro día salir a buscar un trabajo para poder comprar una cama y dinero para comer. Me comí el sándwich ya de tarde, esperé mucho tiempo para que así no durmiera con el estómago vacío.

Cuando llegaron los otros chicos, nos sentamos todos a compartir en la mesa de la cocina ellos hablaban de cómo fue su día en el trabajo, y gracias a Dios Nathan me dijo que en su trabajo necesitan personal así que me llevaría con el a aplicar. Estaba muy feliz, al dar las 11:00pm cada quien esperó su turno para entrar al baño y nos fuimos a dormir a nuestras habitaciones.

Así llego el día de mañana y me levanto con la sorpresa de que...

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⏰ Última actualización: Aug 11, 2020 ⏰

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