Oikawa's Last Wish/es/ El último deseo de oikawa

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"Solo elige, joder."  Iwaizumi estaba tratando de controlar su voz, pero cada momento se volvía más difícil.  Especialmente cuando su mejor amigo estaba siendo extremadamente difícil.

Oikawa, al estilo Oikawa real, simplemente puso los ojos en blanco lentamente antes de soltar un suspiro ronco, "Maldición, Iwa-chan.  ¡Esta fue tu idea!  ¡Deberías tener paciencia conmigo! "

"De hecho, ahora me arrepiento".  Iwaizumi resopló pensando en descartar toda la idea que vio en la televisión anoche, que pensó que era bastante brillante, olvidándose por completo de que Oikawa realmente podría ser una diva.

"Hmn ... ¿qué tal abrazar a cientos de gatitos?"  Oikawa reflexionó frunciendo los labios secos.  Iwaizumi lo miró, "¿Gatos?  ¿Kuroo se te pegó tanto? "  Demasiado tarde para ver esa sonrisa torcida en el rostro de Oikawa y saber que solo estaba bromeando.

Iwaizumi gruñó, "En serio te voy a estrangular".  Oikawa, sin embargo, se limitó a soltar una carcajada antes de tomar su tenedor para seguir comiendo sus frutas.  Iwaizumi quería una respuesta, pero no quería evitar que Oikawa comiera, especialmente cuando era la primera vez que lo veía tan animado ... probablemente ante la perspectiva de que se le concediera su deseo.

"¿Qué tal un día entero de películas de extraterrestres, pizza y palomitas de maíz?"  Tararea, tomando una cucharada de yogur natural del recipiente de plástico al lado de su plato medio vacío.  Siempre había oído hablar de mirar un vaso medio lleno en lugar de medio vacío, pero en este momento, medio vacío parecía mejor porque significaba que Oikawa estaba lo suficientemente distraído como para comer algo.

Él resopló, "Ese es un pésimo deseo".

Oikawa hizo un puchero, "¡Oye!  ¡No lo es!  Pasar un día viendo películas de extraterrestres sería increíble ... "

"Tooru.  "La voz de Iwaizumi era baja y tranquila pero hizo que Oikawa levantara los ojos para mirarlo.  Hubo pocas ocasiones en las que Iwaizumi lo llamó por su nombre, y cuando lo hacía, siempre hacía que Oikawa revoloteara un poco.

"Se Serio."  Iwaizumi continuó, "No gastarías tu deseo en conseguir eso.  Pregunte cualquier otra cosa.  No es algo que podamos hacer en cualquier momento, en cualquier día ".

Oikawa parpadeó hacia él ... pero Iwaizumi vio como esos ojos marrones se volvían sombríos y perdían su chispa de entusiasmo.  Observó cómo esos ojos miraban la bandeja de comida en su regazo, que la enfermera había llevado esa mañana.  Vio cómo las débiles manos que sostenían el utensilio de plástico temblaban un poco, antes de recuperar el control una vez más y de dar la sonrisa más triste y hermosa que Iwaizumi jamás había visto. 

Luego, con una pequeña voz muy inocente, dijo: "Quiero jugar voleibol con nuestros antiguos compañeros de equipo ... en la cancha de nuestra escuela secundaria".

Allí estaba .  Iwaizumi de alguna manera sabía que eso era lo que realmente quería.  No sabía si quería que Oikawa se lo dijera porque sabía que no sería capaz de dárselo ... incluso si quisiera.  Incluso si llamara a sus antiguos compañeros de equipo que ya tienen vida propia, pero seguramente dejarían todo y volverían a Miyagi solo para hacer esta única cosa por su antiguo capitán.  Lo harían, sin duda alguna.  E incluso si tuviera la remota posibilidad de que no lo hicieran, él lo haría.

Pero los médicos no lo permitieron.  No cuando la condición de Oikawa durante las últimas semanas empeoraba.  No cuando ninguna cantidad de medicamento podía contrarrestar las células cancerosas que se extendían por sus pulmones, que cada momento de vigilia se sentía demasiado rápido como la respiración corta de Oikawa ... se perdía fácilmente.

Así es como es ahora, de todos modos... e Iwaizumi como su mejor amigo lo había vivido con él... a través de los días buenos y malos.  Este era uno de los buenos días e Iwaizumi estaba agradecido de que él y Oikawa estuvieran teniendo una conversación casi normal, aunque molesta, con este último comiendo.

Tomaría esto en cualquier momento de aquellos días en que Oikawa siempre tenía demasiado dolor constante, cuando describía la respiración como ahogarse en el aire ... cada trago siempre se hacía corto, cada oxígeno se sentía como si lo apuñalaran en el pecho repetidamente y Oikawa aguantaba  Como un bebé llorón que es, Oikawa se negaría a calificar el dolor como un 10, porque estaba seguro de que vendría algo más doloroso y solo se estaba preparando para eso.

Esos días en que Iwaizumi se debatía entre salir corriendo de la habitación del hospital, volver a casa, acurrucarse en la cama y olvidar la expresión de desesperación en el rostro de Oikawa.  Pero siempre, estúpidamente, elegiría la otra opción que era quedarse al lado de Oikawa.  Párese en silencio junto a la mesita de noche, al alcance de la mano ... pero nunca alcanzaría.  Oikawa siempre lo miraba y cada vez que lo hacía, Iwaizumi siempre temía que esa fuera la última vez que esos ojos marrones lo miraran.

"Yo te llevaría".  Dijo, sin una sola duda en su voz: "Una vez que salgas del hospital.  Llamaré a Mattsun y Makki.  Diablos, incluso llamaré a nuestros kouhais.  Será una mini reunión ".

Oikawa lo miró con ojos nublados, incrédulo, antes de que su rostro floreciera en una sonrisa ensordecedora, "Podemos tener un partido de práctica".

Iwaizumi no se dio cuenta de que él también estaba sonriendo ... pero solo porque había pasado mucho tiempo desde que vio la sonrisa de Oikawa.

Se quedan así callados hasta que llega una enfermera para entregar un medicamento y llevarse la bandeja de comida.  Tiene una voz suave y un rostro amable ... y si Iwaizumi estaba siendo honesto, se veía un poco linda.  Era un poco tímida pero sus movimientos eran elegantes, y le dio una cortés sonrisa a Iwaizumi antes de irse.