why? ; luzito

✧ 𝟗𝟎. ✧

¡𝐅𝐈𝐍𝐀𝐋!

One-Shot (Narrado OOC).

. . .

*esto ocurrió entre las notas 87 y 89.*

"Nunca me lo esperé, si te soy sincero."

El ocaso les pega en el rostro en la cima de esa montaña, tienen los ojos entrecerrados por la intensidad, más a uno se le ocurre dar la espalda a la esfera de luz que se ocultaba a lo lejos. Siendo seguido por una mirada confusa de su acompañante.
Él siente un poco de calor, dándose cuenta de que empezaba a transpirar. Y aunque ahora se abanica con el cuello de su sudadera, la sensación de fatiga no se va de su cuerpo que de por sí se hallaba cansado desde antes. Pensó "vaya día de mierda tuve", y bueno, fue así; hasta hace una hora se encontraba junto a Rubius ayudándolo a algo sumamente ilegal. Ya ni se tomaría el tiempo de reprocharle, tenía prisa por acabarlo ya que  conociendo a el híbrido, irse sin darle una mano no era una opción. No está molesto, no, sorprendentemente tiene otra sensación, pero no la comprende; es decir, si es por el chico que ahora se encuentra junto a él, no hay motivos por los cuales ponerse así, después de todo es otra más de sus salidas de pareja ¿no? Claro, no pasará nada más, como siempre.

"¿El qué?"

"Esto. Es decir, yo antes juraba odiarte por algo tan ridículo."

"No es ridículo en realidad."

Luzu rueda los ojos con una pequeña sonrisa de por medio. Afirma asintiendo, dando a entender que sí lo es mientras que su pareja lo observa aclarando su garganta para continuar con sus palabras. 

" Yo, aún me sigo sintiendo mal por eso"

"Oh, no puede ser..."

La mano fría del joven ojirubí acaricia una mejilla del contrario, dejando a este estático ante el suave toque. Sus ojos vuelven a reflejarse en los suyos, sintiendo una calma indescriptible.

"Yo fui un chiflado. No debí reaccionar de esa manera. Está bien que quería ser el alcalde pero... "

Vuelve a plantearse cómo explicarlo con palabras.

"el enojo que tuve fue tan exagerado."

La voz comienza a entrecortarse, piensa ¿cómo pude ser tan estúpido? a la vez que juega con el agarre de sus manos. Deja de acariciarlo y lo mira directamente. Quiere soltar todo lo que piensa en ese momento pero no sabe como empezar, hay tantas cosas proyectándose rápido en su cabeza.

"Perdóname."

Ambas gargantas comienzan a sentir un nudo, el castaño traga saliva para poder responderle. ¿Por qué es tan difícil incluso para él?

"Lolito, no tienes que."

"Sí, tengo que."

El mencionado por Luzu se pone de pie,  lo mira, lo mira una y otra vez y aún no comprende como es que su yo de antes pudo ser tan egoísta, tampoco el porqué el sabor amargo en su boca se instaló de repente, o el porqué de la presión que ejercen de nuevo sus dientes contra su labio inferior, o siquiera el motivo de su cuerpo estremeciéndose ante el contacto visual con su amado. Todo pasa como una ráfaga de aire fuerte.