Oneshot

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Una noche de Picnic
Por Raquel Flores

     Terry no salia de su asombro ¿¡Cómo habian enviado a Candy, su pecosas a esa horrible , oscura y fria torre!? — A su pecosa adorada, ella que le tenía tanto miedo a la oscuridad. — sonrio al pensar en todas los fantasmagóricos pensamiento que le llenarian su bella y rubia cabecita. Y no bastando  ese castigo tambien  seria expulsada del Real Colegio San Pablo...

     Terry se sentia impotente, furioso!, se había tragado su orgullo y fue a pedirle… no, fue a suplicarle a su padre el Gran Duque de Granchester que por favor lo ayudara! " Favor" "Ayudar", dos simples palabras que el jamás pensó decir y mucho menos a aquel hombre tan lejano y distante para él, razón por la cual no le sorprendió la respuesta tan tajante que le dio el Duque!.

     Cabizbajo y preocupado iba de un lugar a otro pensando: — ¿que hago? ¿que puedo hacer por ti pecosa mia?. —Debes estar tan asustada, hambrienta y con mucho frio!.

     Entinces una idea se encendió en su cabeza!...—le daría a Candy su tan prometido pincic.

***************

     En la torre de castigo, Candy se reprochaba el haber  sido tan estúpida por caer en esa tampa, que por demás sabía, habia sido idea de la desgrasiada de Eliza.. —Apretó los puños —“Ay Eliza si no me expulsan de esta, me expulsaran por todas las cachetadas que te daré y por los pisos que barreré con tu cabellos"—siseó ... y ahora estaba alli, sola, con el frio colándose entre sus huesos, asustada y con sus ojos ya secos de tanto llorar. —Llorar de rabia, de impotencia, y se volvía a repetir: —estupida! Estupida! mientras se daba golpes en su cabeza, el último  fue tan fuerte que gritó y el pobre Klim que estaba en su regaso salto al piso.

     Cuando se disponía a iniciar otra ronda de cocotasos, escuchó la risa del causante de todos sus males.

—¿Ya te hicistes amiga de todos los fantasmas que habitan ahí Pecosa?.

—Terry, ¿cómo se te ocurre decir eso?

—Bueno eso es lo que siempre he escuchado.

—Y tu tan tonto vas a creer  eso —mientras lo decía, Candy movía la cabeza de un lado a otro en busca de algun fantasma.

—Bueno, bueno es lo que dicen, no lo que yo creo —dijo Terry.

—¿A que has venido Terry a burlarte de mi?

—No Candy —respondió él —vine a preguntarte ¿si aceptas hacer un picnic conmigo esta noche?.

—¡Un picnic!  —dijo Candy.

—Si —respondió él —traje todo lo que creo se debe llevar a un picnic!

     Terry solo traía en sus manos su corazón y las ganas de estar con la jovencitas que causaba sus suspiros!.—Después de darse tooodo el postin del mundo para responder, Terry habló: —esta bien señorita Pecas acepto su negativa.

—Si, si, si , acepto!. —respondió Candy cuando él emprendía su retirada.

—Ok Pecosa, ayúdame a estirar el mantel para colocar todas las delicias que traje.

—Está bien chico mandon —respondió ella esbozando una sonrisa —ya listo ahora saca todo de la cesta —dijo Candy.

—Si pero no te las comas mientras las sacas ¿Ok?.

—Ok —respondio Candy mientras colocaba sus manos sobre su pecho y escuchaba los acelerados latidos de su corazón, su Terry estaba haciendo lo más dulce que nadie habia hecho por ella.

—Pecasss, deja de comerte las fresas —grito Terry desde el otro lado de la puerta y aguantando las ganas de reir.

—Lo siento Inglesito arrogante pero estas fresas estan deliciosas y no me puede resistir —lamió sus labios como si realmente estuviera comiéndose una.

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⏰ Última actualización: Aug 18, 2020 ⏰

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