Prologo

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-Extrañaba casa – Dijo Alexander.

-No se pongan cómodas señoritas – Les dije- En dos semanas tenemos un nuevo viaje planificado.

-No fastidies Samm –Dijo Will riéndose- Déjanos descansar.

-El honorable coronel Samm Leumas nos invitara la comida y la bebida de hoy muchachos –Dijo Brooke.

-No hay chances –Les respondí- Pienso invitarme a mi mismo una hamburguesa de Mc Donals, hace tanto no pruebo una.

-Las hacen con gusanos y te hacen obeso –Dijo Alexander.

-Me encantan los gusanos, y para madres me basta con la que tengo –Respondí.

El avión comenzó a tener turbulencias “Atención Señores, abróchense los cinturones vamos a aterrizar”

-Hogar dulce hogar –Dijo Will.

-Iré a la cabina –Dije.

Salí del compartimiento trasero y me dirigí a la cabina. Ni bien entre sentí un clima tenso en el aire, casi como si pudiera sentir lo que el piloto.

-Jacob, ¿Que esta pasando? –Dije- Te siento tenso.

-Ehhh, nada de importancia, probablemente una falla en la comunicación, nada más –Dijo Jacob.

-Cuéntame, ¿Qué Pasa? –Insistí.

-Nada de importancia, tan sólo la torre de control dejo de responder hace aproximadamente dos horas y no he logrado establecer contacto de nuevo, es como si estuvieran allí, pero no están respondiendo –Explico- No importa, aterrizaré igual y ya veremos que pasa.

-Torre de control aquí Ski Black 70, solicito permiso para aterrizar, repito, solicito permiso para aterrizar, cambio –Dijo por radio Jacob.

Estática, esa fue toda la respuesta que recibimos.

-Torre de control aquí Ski Black 70, haré un descenso de emergencia, cambio –Repitió Jacob por radio- Solo consigo estática eso es todo, será difícil aterrizar sin las luces que iluminan la pista, siéntate y abróchate el cinturón.

El avión comenzó a descender, se acercaba el ocaso, por lo cual había poca luz que iluminara la pista pero algo se veía. Las habilidades de Jacob nos llevaron a tierra sanos y salvo.

Recogimos nuestras pertenencias y nos dispusimos a descender, abrimos la compuerta trasera y salimos. La pista estaba vacía, nadie había venido a recibirnos.

-¿Donde están todos? –Dijo Jacob- No me respondían por radio, pero no puede ser que aquí no haya nadie.

-Esto es muy extraño. Vamos, vayamos dentro –Dije.

Comenzamos a caminar con nuestras pertenencias hacia el centro de comando. No había absolutamente nadie.

-Aquí hay una nota –Dijo Will.

Me acerque, la tome y leí en voz alta:

Perdón equipo, la cosa se salio de control y tuvimos que abandonar el lugar, vayan a sus casas con sus familias y cuídenlas, no sabemos cuando vamos a solucionar todo esto, ¡Suerte!”

Estaba firmada por el General Griffin.

-¿Que significa esto? –Pregunto Alexander.

-No tengo ni idea –Respondí.

-Lo lamento muchachos, tengo que ir a ver si mi familia esta bien, luego averiguaremos que es todo esto. –Dijo Will.

-Yo también –Dijo Jacob.

-Vámonos de aquí –Dije.

Los cinco nos subimos a nuestro auto y nos marchamos de allí.

Ruinas de lo MuertoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora