Capítulo XII

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El sábado llegó y Amy estaba emocionada, su madre ansiaba conocer al famoso Matías, que por lo que notaba estaba robando el corazón de su hija. Amy por su parte, le preocupaba un poco esa parte de que no había mencionado sobre su familia, principalmente por la forma de ser de sus padres y el resto de los miembros que conformaban la misma, tal vez debió mencionar que sus padres eran grandes empresarios, y tal vez hubiera sido mejor que antes de llevar a Matías con ellos debía hablarle sobre el tema con él

Mientras Matías, nervioso en su casa esperaba la hora para salir en dirección a la casa de Amy. Sabía que conocer a su familia sería algo interesante en muchos sentidos y que debía saber manejar la situación, pues aunque no sabía mucho de su familia y se notaba que eran personas de alto nivel social, que probablemente podrían reaccionar de cualquier modo ante su presencia.

Llegada la hora, Matías se dirigió a casa de Amy, al llegar pudo notar que habían entre cinco o seis carros estacionados frente a la casa, y que había movimiento en la casa, por lo que algo temeroso se acercó y llamó a la puerta, una señora muy amable le atendió.

-Buenos días, ¿en qué le puedo servir joven?

- Buenos días, disculpe ¿se encuentra Amy?

- Sí se encuentra, sólo que ahora ella va de salida, no sé si quisiera dejarle algún mensaje y yo se lo daré.

- Muchas gracias, muy amable de su parte. Sólo que ha sido ella quien me ha invitado el día de hoy, quisiera hablar con ella.

- Permítame joven, pase adelante.

Matías entró a la casa, quedándose en el pequeño jardín que seguramente servía como algún tipo de recibidor, este se encontraba al lado de un amplio patio. A los minutos de estar ahí, apareció la señora que le había atendido.

- Pase adelante joven, disculpe la espera.

Entró a la casa y quedó realmente asombrado ante todo lo que veía, sabía por lo que notó la noche del sábado que Amy provenía de una familia de buena clase social, pero no imaginaba que fuera a ese nivel. Inmediatamente por las gradas que se encontraban al fondo vio bajar a una sonriente Amy, con el cabello recogido y una blusa un poco holgada y short. Él siempre la veía más hermosa de lo que la había visto el día anterior.

- ¡Hola Matías! Qué bueno que viniste, me alegra verte.

- Hola Amy, lo mismo digo. Siempre es un gusto poder verte.

- Yo los dejo solos -dijo la señora-.

Amy lo dirigió a la sala, donde se encontraban algunos miembros de su familia. Quienes cuando vieron entrar a Matías quedaron sorprendidos y algunos esperaban respuestas aún sin hacer las preguntas.

-Amy

Estaba muy emocionada por este día y ver a Matías en mi casa me ponía aún más nerviosa, cuando lo llevé a la sala, algunos de mis primos y mis tíos estaban ahí esperado que mi padre y abuelo tomaran la decisión de salir, pude notar varias caras de asombro y otras con dudas, así que me dispuse a hablar, antes que mi tía comenzara con sus comentarios fuera de lugar.

- Familia, él Matías, es mi amigo y el día de hoy nos acompañara al viaje.

Todos comenzaron a darle la bienvenida y a saludarlo, estaban siendo muy amables con él, cosa que en mi familia era muy normal la mayor parte de veces. Sin embargo no podían faltar los comentarios de mi tía Carmina.

- ¿Él es tu novio? ¿y ese milagro que traes a un chico a casa? Es más, a una actividad familiar. Esto definitivamente es algo sorprendente, ¿no lo creen? -Dijo dirigiéndose al resto de mi familia-

Amor de OtoñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora