Locura en la ciudad

DESCUBRIENDO

.Valentina:

Madre del amor hermoso ¿que es todo esto? Hace apenas unas horas que llegamos a New York y mis ojos no dan abasto para ver todo, aquí la gente anda como locos, tropezándose unos con otros mientras están sumergidos en sus pensamientos, mirando sus teléfonos sin cable, andando deprisa.Lo que mas me llama la atención es la manera en que van vestidas las mujeres, si puede decirse ropa porque dios mio...hay cada una que se le ve todo.Esto va a ser una locura, me estoy asfixiando y apenas hemos llegado, no se yo si aguantaré mas de una semana aquí, como hecho de menos la tranquilidad de mi hogar y la seguridad de estar en los brazos de Lucho.

Mientras estemos aquí vamos alojarnos en una pensión, nuestros padres nos han proporcionado dinero para hacer frente a todos los gastos que conlleva nuestra estancia, no tengo ni idea de como funcionan ni la mitad de aparatos electrónicos, esto es todo nuevo para mi.Lo peor que voy a llevar creo que será el ruido del exterior, solo se escucha el motor de los coches y alguna que otra sirena, a ver quien consigue dormir...con lo relajadita que estaba en mi granja donde solo oigo los animales.

-¿Por donde empezamos chicas?- pregunta Renata mientras se sienta encima de la cama donde estamos Lucia y yo.

-Nada mas llegar y ya quieres salir ufff descansa un poco mujer.

Menos mal que Lucia tiene el mismo pensar que yo porque si no tierra tragame.

-A ver, estamos aquí para explorar y vivir ¿no? así que no me sean como un par de monjas y haceros el ánimo de que no vais a descansar porque no os voy a dejar.

-Vale...tu ganas, pero sin excederse que nos conocemos Renata y sobre todo a ver donde nos llevas- le contesto.

-Así me gusta ¡las amish al poder! para empezar lo que vamos hacer es ir de compras porque  como comprenderéis no vamos a vestir así y luego ya veremos que hacemos.

-Esta bien...- contestamos las dos a la vez.

Antes de salir de la pensión Renata le pregunto al chico de recepción si podría indicarnos donde se encontraban las tiendas y muy amablemente nos proporciono un plano para no perdernos.Fuimos a varias tiendas, Lucía y yo estábamos completamente perdidas pero como era de esperar Renata todo lo contrario.Empezó a cargar de todo, que si pantalones cortos, jeans ajustados, camisas entalladas, sueters donde no tapaban la mitad del abdomen, si sus padres la vieran la castigarían de por vida.Yo me decidí por algo mas discreto, algún que otro jeans y varios sueters que no llaman mucho la atención, no me veo muy cómoda con esta vestimenta pero supongo que sera cuestión de acostumbrarme, ah y se me olvidaba, también me he comprado unas zapatillas de deporte.

-¿Y ahora que?- pregunta Lucia.

-Que os parece si vamos a comer algo, tengo mucha hambre- como no la voy a tener si desde que salí de casa aun no me he llevado nada a la boca.

-Así me gusta, que mis chicas se animen y tomen iniciativas.

Después de comer por fin volvimos a la pensión, que bien...por fin voy a poder descansar mis pies, vamos que no me quito ni la ropa, ufff que bien se siente...¿que estará haciendo Lucho ahora? seguro que no deja de pensar en mi.

-¿Valentina puedo pasar?- es Renata.

-Claro, pasa, siéntate aquí- di unas palmadas al colchón para que se sentara- ¿que sucede?

-Sabes que Lucia y tu sois mis mejores amigas y hacer este viaje juntas para mi es toda una experiencia y un recuerdo muy grande que voy a llevar dentro de mi para siempre porque aunque seamos tan diferentes en la manera de ver las cosas os quiero mucho pero como sabes, yo no encajo en nuestra comunidad, por mucho que vaya madurando no me adapto a sus normas, no quiero pasarme el resto de mi vida siendo una mujer que se debe a las labores de la casa, a sus múltiples hijos y a su marido yo quiero vivir y sobre todo ser yo misma con lo que pienso y siento y no tener que estar diciendo a todo que si.No voy a regresar, mientras estemos aquí mirare a ver si encuentro algún trabajo pero te pido que dejes atrás tus pensamientos y disfrutemos de nuestra última aventura, respetando tus principio lo se, lo se.Que dices ¿harías eso por mi?

-Ay Renata esto ya lo sabíamos Lucía y yo y si me prometes que nunca nos vas a forzar hacer algo que realmente nos pueda incomodar te prometo que vamos hacer lo posible para que esta aventura sea la mejor de nuestras vidas.

-Gracias amiga, ah una última cosa, espera que ahora regreso- no tardo en volver a mi cama ni un minuto- ten esto es para ti, quiero que te lo pongas esta noche.

-¿Que es?

-Abre el paquete y lo veras.

Cuando lo abrí me quede sin habla, es un vestido largo pero ceñido, de un rojo eléctrico con un escote en forma de V.

-¿En serio pretendes que me ponga esto?

-Bueno solo esto no, faltan estos zapatos, no pensaras ir con lo que llevas o las zapatillas de deporte que te has comprado, aceptalo por favor, estoy segura que te vas a ver divina con el, anda di que si...

No se que hacer pero si bien es cierto que es muy bonito y tiene un tacto muy suave, en fin, todo sea por mi amiga, nunca le he podido negar nada, bueno realmente a nadie, soy muy fácil de manejar.

-Es precioso Renata, me voy a ver muy rara vestida con el pero acepto.

-Eres la mejor y esta misma noche como te he dicho antes lo vamos a celebrar.

-¿Como?

-Si, nos vamos a ir a cenar por ahí y luego a uno de esos locales que están tanto de moda aquí, quiero ver lo que es la fiesta en la gran manzana.

-Señor mio...sera mejor que rece por nosotras antes de irnos.

-Si si, tu reza por mi, jajaja.

Cuando salió de la habitación cogí el vestido y lo extendí sobre la cama, si Lucho me viera con el seguro que se pondría como loco, jajaja o no...es tan estricto con las normas...

Bueno vamos a ver que nos depara la noche y el ocio nocturno de esta gran ciudad.