Dificultad de amar.

Prólogo

Eran las 3 am en el reloj, quizás un poco pasado de las tres. Mew se levantó de la cama, se colocó  los boxers que estaba arrojados a un lado de la cama y se estiró un poco. Volteo el rostro hacia un lado, encontrando una espalda perfectamente relajada. Una persona boca abajo recostada y durmiendo profundamente. Tenia el cuerpo descubierto hasta su cintura donde las sabanas cubrian su trasero 

— Vas a enfermarte Kana.

Se inclinó hacia adelante para besar una de las marcas que había dejado antes en ese hombro ancho y chocolate. Le cubrió bien con la cobija y se levanto después de la cama. Caminó entre su habitación para abrir la puerta. Cuando Gulf se quedaba a dormir, tenia que dejar  Chopper en su pequeña guardería un rato. Solo unas horas hasta terminar las tres rondas que siempre tenían. No entendía aún como el joven tenía tana jodida resistencia, quizás era su cuerpo que ya estaba envejeciendo que ya no aguantaba el ritmo de alguien siete años menor que él.

Camino hasta el pequeño corral de Chopper y le abrii la pequeña puertitita, aun que su pequeño canino solo levantó el rostro para mirarle y volvio a acomodarse y seguir comodamente dormido en su camita. El pequeño ya se habia acostumbrado a ese tipo Gulf que siempre venia con su padre humano y terminaban guardandolo en su corral.

— Bien, quédate ahí. De todas formas te deje abierto y dejare la puerta de mi habitación abierta.

Le mencionó pero el cachorro hizo caso omiso.

Fue a la cocina por un poco de agua dejando salir un pequeño suspiro, ya iba a cumplir casi dos años de conocer a Gulf, y un año de llevar una relación secreta con el mismo. Estaban terminando de grabar Tharntype, él ya estaba a punto de ir de gira y Gulf se quedaría a ver proyectos y seguir promocionando marcas.

Agachó la mirada un poco, cerrando el agua y tomandole al liquido incoloro.

— ¿Mew?

El mencionado volteo por reacción, Gulf se acercó para tomar el vaso de agua y tomarse lo que restaba de contenido.

— ¿Que haces despierto?

— No te sentí a mi lado, y cuando no estás hay dos opciones. O fuiste a jugar videojuegos o estabas pensando. ¿Que pasa?

— Nada.

— Mew... Primetimos no ocultarnos nada.

— Lo sé. — Tomó el vaso con cuidado, dejandolo en el fregadero y se acercó para tomarle por la cintura y abrazarlo. Recargo su mentón en el hombro fe Gulf y cerró los ojos, sintiendo su aroma. — Tengo miedo de perderte.

— Ow. No me vas a perder na krab, que dices.

— Es que... Voy a empezar la gira y...

— Phi... ¿Eso es lo que te preocupa? Puedo ir contigo y...

— ¡No! — Se separó repentinamente, lo que hizo a Gulf dar un saltito. — Es decir, no es que no quiera. Es que no quiero que pongas en pausa tus sueños y tu carrera por mi.

— Pero Mew...

— Esta bien, solo tengo pensamientos tontos. A esta hora siempre los tengo. Vamos a la cama. — Tomó el rostro del menor entre sus manos para besarle. Los labios de Gulf siempre habían sido jn paraiso para Mew,  desde la primera vez que los probó en los ensayos para la primer temporada del BL que compartirían, se habia vuelto adicto.

— Hmm... — Gulf aprovecho para rodearlo por los hombros para jalarlo hacia atras, llevándolo despacio hasta la habitación nuevamente. — No pienses cosas tontas. Tu y yo estaremos juntos muchos años ¿Entendiste, Mew Suppasit? Me lo prometiste

— Si... Es cierto. — Mew comenzo a reir, empujándolo un poco para dejar que Gulf cayera de espaldas a la cama, se acomodo sobre él, como ellos sabian perfectamente que sus cuerpos se amoldaban. — Te amo, Kanawut.

— Te amo na krab — Gulf Sonrió de oreja a oreja rodeandole por los hombros para besarlo de forma suave.

Una manera tan simple pero a la vez tan profunda, una forma en que ellos habían descubierto que se llevaban perfectamente. La lengua del menor buscó un poco mas y cuando tuvo la aprobación del mayor la metió, jugueteando con la contraria. Ambas respiraciones armonizaban juntas, se mezclaban, ya no sabian cuando terminaba o iniciaba una. Fue Mew quien rompió el beso, recostandose sobre el menor, abrazandolo posesivamente por la cintura

— Vamos a dormir... Mañana tenemos un dia ocupado, ademas de la premiación.

— Mh.. Buenas noches. — Gulf acarició la espalda y el cabello de su novio despacio, haciéndolo arrullar hasta que ambos se volvieron a quedar dormidos.