Plot Twist

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El día que nos conocimos fue un plot twist sin duda. El dónde fue una fiesta, el momento fue a las once de la noche, del cómo no estoy seguro, y del porqué todavía menos. A lo que me refiero, es que habían más probabilidades de que no ocurriera, por mucho que nuestros hyungs me repitan que en algún momento íbamos a conocernos porque compartimos algunas amistades. Yo sigo preguntándome cómo es que fue posible.

Tu odias las fiestas, es de esas cosas que todo el mundo sabe de ti, que no te molestas en ocultar. Por otro lado, también odias mantenerte despierto después de las doce si no es estrictamente necesario. Cuando haces música es más bien una excepción. Es tu pasión después de todo, al igual que yo —no es por alardear— por eso me acompañas en mis desveladas.

En realidad, cuando empezamos a escribirnos me di cuenta de que algo era diferente. A mi siempre me ha gustado hablar hasta altas horas de la noche, y tu nunca —desde la primera vez que hicimos exactamente eso— te quejaste o me dejaste en visto. Es decir, yo te he gustado desde siempre, ¿Verdad?

Ok, dejando claro que era muy extraño encontrarte en fiestas, luego estaba yo, que asistí de casualidad porque la persona que me gustaba iba a asistir. En ese momento no eras tú, ya lo sabes. También terminé mi tarea demasiado temprano, lo cual nunca pasa, lo sabes también.

Una serie de casualidades que me llevaron a estar en el patio de la casa de Soobin a las doce de la noche con el corazón muy roto, sentado en un columpio, y a ti a estar en el mismo patio, enviándole notas de voz a la persona con la que acababas de terminar una relación de tres años, dándome la espalda.

¿Cómo es que los planetas de tu universo y el mío se alinearon a la perfección? ¿No es eso demasiado improbable? De nuevo, me sigue pareciendo increíble. Porque si tu no hubieras terminado con tu ex, y yo no acabara de ver a mi crush besando a alguien más, seguramente no nos hubieras fijado en el otro. O quizás sí, pero todo habría sido mucho más complicado de lo que fue al final.

Otra cosa que me parece increíble, es que la primera vez que vi tu cara fue también la única vez que he visto una expresión de profunda tristeza en ella. Después de eso no la he vuelto a ver, y menos mal, porque eso significa que desde que me conociste no te sentiste tan devastado. Tu me lo confirmarse tiempo después.

El plot twist ocurrió cuando en vez de irte a tu casa a llorar tu amor perdido como lo estaba haciendo yo, decidiste que era buena idea mandar a la mierda tu teléfono lanzándolo detrás de ti, dándome directo en la nariz con el jodido aparato.

Obviamente te disculpaste, y yo obviamente me morí de vergüenza, odiando mucho ser un imán de objetos voladores. Fuiste por hielo, te quedaste conmigo, y claro, tuviste que decir una de esas cosas que me parecen tan bonitas, y que en ese momento no pensé que terminarían siendo lo que más me gusta de ti. Yo estaba canalizando mi dolor físico y mental.

—No puedo creer que estuve a punto de irme sin mirar atrás —dijiste para ti mismo, pero yo logré escucharte.

Ahora que siempre estas observándome, y yo siempre estoy observándote, tengo muy claro a qué te referías.

De todas las realidades que hay, existimos en una en la que a ti, Kang Taehyun, la persona más tranquila y menos violenta que conozco, se te ocurrió tirar tu teléfono, y a mi, Choi Beomgyu, se me ocurrió responderte: «De lo que te pudiste haber perdido» cuando soy la persona más tonta ligando y sin ego del mundo.

En ese momento aún no sabía que sería tu novio. Que sería muy difícil, pero también muy lindo.

Demasiado listo. | taegyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora