–¡Rayos! ¡¿Podrían darnos un descanso!? – se quejaba una castaña exhausta.
–¡Uraraka-san, la maldad nunca descansa! – Iida movía las manos cual robot.
–¡Ya lo se! Pero hemos peleado por mucho tiempo. – se recargó de sus rodillas tratando de calmar su exhausta respiración.
–¡Uraraka-san detrás de ti! – gritó un alarmado peliverde.
La muchacha en un ágil movimiento ya tenía al villano pidiendo clemencia por su pobre brazo, por la brutal llave que le estaba haciendo. Ella no se contuvo y le quebró el brazo. Sonrió al recordar que ya era su décima fractura.
Todo el dekusquad maldecia a los villanos que hace unas horas dieron con ellos en una práctica al aire libre. Si bien nunca bajaron la guardia, pues siempre corrían la pésima suerte de encontrarse con los malos, no esperaban que fueran centenas y centenas de ellos.
Todoroki, por acto reflejo se encontraba un poco lejos, también ayudando a sus amigos inmovilizado a algunos con su hielo y a otros los calcinaba. Daba pesados jadeos tratando de estabilizar su temperatura con su kosei de fuego. Miró por todos lado y en efecto no les veía fin.
A unos metros más, se encontraba Kirishima peleando cuerpo a cuerpo con un villano que le había dado problemas al no rendirse de una vez por todas. También Kaminari daba todo de sí para no agotarse tan rápido y quedar como estúpido, literalmente. Luego estaba Bakugo que parecía muy divertido con la situación.
– ¡Nada mejor que patearles el tracero a estos imbéciles! – miraba de forma retorcida a un grupo, que al ver su rostro empezaron a temblar. – ¡A. P SHOT!
La situación se transformaba a favor de los héroes. Y eso, a esas infames personas les empezaban a desesperar, por lo que uno de ellos teletrasporto a una niña que comenzó a gritar como si no hubiera un mañana.
–¡¿Una niña?! – preguntó confundido un Kirishima que no dejaba de golpear a un sujeto en la cara.
– ¡¿Es rehen?! – Kaminari se levantaba del suelo tras ser empujado por el tipo que estaba siendo masacrado por Kirishima.
Los malvados hombre que tenían a la criatura, mantenían sus manos sobre ella. Pero fueron derribados por Sato, que iba acompañado de Tokoyami quien agarro a la pequeña con Dark Shadow. Tras poner a la niña a salvo, fue a respaldar a su compañero que no podía noquear a todos él solo.
Un villano, que pudo escapar de la paliza que les estaba proporcionando el alumno de la clase 1A, se encaminaba en dirección a la pequeña. Paró en seco cuando vio al ganador del festival deportivo y al hijo del héroe Endeavor muy cerca de él. No teniendo de otra, juntó sus manos y abrió los ojos que tenían en ellos un punto de luz como si sus ojos proyectaran la mira de un arco que apuntaba a su objetivo.
Bakugo al ver a donde dirigía su mirada, sin dudarlo corrió para ponerse enfrente de la civil y de esta manera recibir lo que parecía ser un rayo.
Todoroki al divisar que el rubio se estaba sacrificando por la niña, se deslizo sobre su hielo y llegó junto a él cuando el rayo ya estaba casi tocandolos. Todo se volvió negro para ellos segundos después.•••
– Están fuera de peligro, sólo queda que despierten para su último chequeo – Recovery girl les anunciaba a los chicos que no se querían apartar de sus amigos.
–¡Bakugo!– Mina se mostraba sentimental viendo al rubio dormido.
–¡Ashido-san, debes bajar la voz en este lugar!– reprendió Iida.