"JANET, NOO"- el disparo se escuchó en todo el set de grabación
"Corte"- se escuchó la femenina voz de Patrick o como él decía Patricia.
Grabábamos una importante película para las alfombras de Hollywood, tenía al mejor productor de películas y a la mejor manager o sea yo, tenía una gran suma de dinero asegura para cuando terminara la grabación, el único problema es que cuando termine la película ya no nos necesitaran y nos botaran como basura, estoy preparándome mentalmente para ese día. Mientras tanto dedico mi tiempo libre para buscar un trabajo tan bueno como este, las cosas que pasaban tras cámaras son una completa locura, siempre habrá un chisme nuevo, que fulanito le apesta la boca, que no sabe actuar, múltiples cosas que te hacen no querer entrar en el mundo del teatro.
- Vamos mujer, deja perder tu tiempo escribiendo estupideces y trabaja, Demi necesita más maquillaje.- me regaño mi jefe, según él me comporto como una niña, creo que no le caigo bien. Es apuesto, muy apuesto, tiene el pelo negro peinado como una ola hacia atrás, unos penetrantes ojo grises y labios rosados acompañados con un ligero bigote que le da ese toque de chico serio, es un completo mujeriego, dicen que se folla a la mayoría de las actrices, pero ese no es mi problema.
- Abby, quiero el dorado con piedras, y el vestido de lentejuelas blanco. - ordeno Demi, algo que no haría, mi hora de salida ya se asomaba por mi reloj de mano el cual comenzó a hacer un molesto y agudo sonido.
-Lo siento, ya he salido.- me miro ofendida y salí de ahí antes de que se le ocurriera chillar como perra para que Alex, mi jefe me regañe.
Como seria si Demi trabajara para mí, la explotaría de trabajo como hace conmigo, me está hartando ella no es la única actriz del set. Entre a Starbucks me acomode en la silla y saque mi ordenador, comencé a buscar empleo otra vez y nada, cerré la computadora frustrada causando un fuerte sonido lo que causó que todos voltearan a verme.
-¿Que? Consíganse una vida.- grite, mucho solo continuaron a hacer sus cosas y otros pues se dedicaban a mirarme mal el resto del día, hasta que me aburrí de sus miradas y me largue.
Cantando mí canción favorita me encamine a mi casa, de momento me encontraba en el suelo con un montón de papeles a mi alrededor.
Joder, eso dolió.
-Lo siento señora...- ¿CÓMO QUE SEÑORA?
-Señorita.- fruncí el ceño.
-Claro, lo siento iba distraído.- se disculpó y comenzó a recoger sus papeles, acción que imite, tampoco quería ser grosera yo también iba distraída.
Tome unos cuantos y me detuve a leerlos. "Se busca Manager, si usted está interesado favor llamar al 246-878-0048 para más información visite nuestra página web www.modest.com"
-Disculpe Señor...- lo mire dudosa
- Cowell, Simon Cowell.- estrecho su mano
-Mucho gusto, Abigail Miller, aun este trabajo sigue disponible?- pregunte. Diga que si, diga que si...
-Claro señorita Miller, están acabados de imprimir.- oh si, ajá, como se gustaría bailar en este momento.
-Pues fue una pérdida de tiempo porque acaba de encontrar a su futura manager.- dije victoriosa, a lo cual el me respondió con una sonrisa y dijo:
-El manager no es para mí es para una banda.- me informo
-¿Cuál banda?.- pregunté curiosa
-Pude venir y se los presentare, hablaremos del sueldo y de los compromisos señorita Miller.- comenzó a caminar y lo seguí casi corriendo, joder que rápido caminaba.
"Bien vamos" - dicho esto me guio a su hermoso Mercedes y puso el motor en marcha.
Al rato llegamos a un edificio el cual ya había visto en varias ocasiones.
- Sígueme, es el último piso.- menciono y dicho esto nos dirigimos a donde supongo se reciben los elevadores, presiono el botón y al instante las puertas se abrieron, pensé que tendríamos que espera una eternidad para que se abrieran las puertas del elevador, suelo esperar demasiado en el mi edificio.
No sé cómo, ni cuándo pero ya estábamos en el último piso y eso me ponía nerviosa, no porque conoceré a una famosa banda de mierda, sino porque la altura era una de mis peores fobias.
Las grandes y lujosas puertas se abrieron y lo que vi no lo podía creer, venir aquí ha sido una mala, muy mala idea.
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La Manager de One Direction
Teen FictionLa Manager de One Direction En la cuidad de New York habitaba Abigail Miller, una chica bastante ocupada como para pensar en algo tan innecesario como el amor o eso ella pensaba. La compañía de Modest, a solicitado los servicios de esta chica para...