Los días transcurrían y aquel pequeño sentimiento llamado inconsciente y ajeno crecía intensamente dentro de el. Era uno de los pocos que desconoció en su vida. Hasta que conoció este en el menos pensado.Lian quien era un compañero de apariencia delgada, que pronto se convertiría en su amigo y confidente, con quién compartiría su pasatiempo favorito dibujar.Y en ocasiones pasear por las calles de un pequeño pueblo.
Es así que a medida que su amistad iba creciendo, su aprecio también. Ya no era algo común de amigos, sino que iba más allá de ello.
El soñador Jaén imaginaba siempre el pálido rostro de Lian, tanto así que tomaba fotos a escondidas para guardarlas en su galería privada.
Lo cual no dejó de preocupar a sus padres, quienes con cariño y a la vez firmeza le decían que no puede andar por el mundo amando a otro hombre, eso era algo ingenuo y asqueroso, así lo expresaron.Su vida sería una ruina. Y en algún momento comprendería el porqué.
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Jaén 𑁍
ChickLitSu frondoso calor aún abunda en mi pecho, su llanto cerúleo¿Podría curar alguna de mis heridas?