Buscándote [Tomarry]

1.

Introducción:

Harry Potter siempre fue capaz de ver el hilo rojo suave en su mano el cual aveces parecía enfermo, también podía ver el de su Tía Petunia el cual estaba suelto en dirección contraria a la de su tío Vernon, y el de su tío el cual se había soltado por completo y desvanecido después de desmarcarse hace años, Dudley conectaba con un niño dos años mayor bastante risueño, y Harry.. Harry empezó a ver con ilusión su dedo meñique cuando leyó un libro romántico del hilo rojo y medias naranjas

Narra Harry Potter, edad actual 8 años, fecha actual 27 de junio 1987..

Recibí el pan de mi tía Petunia en una bolsa lo bueno de ir al colegio era que mi tía me daba más comida, tomé la mochila desgastada con dos cuadernos y un lápiz para salir y caminar al colegio, de apoco fui alejando me de Dudley quien se abia conseguido un grupo de amigos "guerreros",me alegre al llegar primero y saque mi cuaderno demasiado gastado para poner atención, no podía escribir mucho pero al menos podía prestar atención, movi mi lápiz un poco nervioso al ver mi hilo ahí.. no estaba tan rojo como el de la mayoría pero.. al menos no se abia vuelto negro y caído, la sensación que el hilo me daba era acogedora pensaba que así se sentiría recibir un abrazo, un poco impaciente mire a la sala viéndolos hilos sueltos ligeramente apuntando en una dirección, el profesor entró y temi más al ver su mano.. tío Vernon abia perdido su hilo y yo no quería perder el mío, empecé a ver las sumas en la pizarra y copié la más difícil para resolverla, era lo único que podía hacer para recordar sin recibir las palizas de tío Vernon o las cachetadas de Tía Petunia por ser más inteligente que Dudley, aunque claro ellos ocupaban palabras mas hirientes..

Finalmente tocaron el timbre y vi a mi primo correr fuera con sus amigos violentos, sabiendo que no tendrían que verme y que no tenía dinero para ir a la cafetería decidí buscar un lugar seguro entre los pasillos de la biblioteca, camine sigilosamente a través de los pasillos y entre en silencio evitando a la encargada, cuando Dudley vino una vez ella le dijo que estaba aquí y me echó ya que según ella la biblioteca no era para jugar a las escondidas..

Llegue al segundo pasillo menos ocupado el primero no fui por que era un poco más oscuro y aveces algunos alumnos se refugiaban ahí para besarse y tocarse, aún no entendía como la señora no se abia dado cuenta ya que aveces eran muy ruidosos y la mayoría dejaba desordenado los libros

Me senté en el piso suspirando aquí estaría a salvo como las otras veces, mire al frente los libros más olvidados y vi Pinocho el cual ya abia leído también vi otros cuentos, la mayoría los había leído y estaban en mal estado, tomé uno rojo oscuro con un corazón envueltos en hilos vi que la descripción decía novela romántica, nunca antes había leído romance y prefería aventura o fantasía así que lo iba a dejar cuando leí que hablaba de hilos del dedo meñique, incluso había una imagen!

Lo abrí y arrugue un poco la nariz al ver las páginas un poco sucias alguien le abia derramado café o bebida..

Aún así seguí y empece a leer, la historia cada ves se fue poniendo más hermosa y termine llorando, había soñado el timbre para la próxima clase pero no había asistido por leer el libro

Ahora sabía que tenía una media naranja! Como seria? Tal ves de piel más pálida que la mía? Le gustarían los abrazos? Y lo más importante de todo estaría bien?!

Pero al mirar de nuevo el hilo de un rojo tenue como.. enfermo, se soltaron mis lágrimas, no quería que se volviera negro y se cayera

Comi mi pan con un pedazo pequeño de jamón un poco caducado por lo oloroso que estaba, lo sabor con gusto y me despedí de parte del jamón cuando el sabor ácido abia sido muy fuerte en mi boca, lo devore y salí dejando el libro en su lugar, llegue a la última clase de lenguaje y empece a tomar atención, estábamos en los acentos y no podía hacerlo muy bien, la clase empezó a pasar muy rápido y yo intentaba acentuar las palabras, escribí un poco de como se acentuaba tratando de resumirlo al lado del ejercicio de matemáticas para luego seguir practicando en mi mente y salir cuando las clases acabaron, me había saltado historia aunque estábamos en los países y la biblioteca tenía muchos dibujos de ellos, intente llegar a casa sin ser notado pero el grupo de mi primo me estaba esperando, no demore mucho más para echar a correr, por desgracia Fabián de 8 años me alcanzó y me empujó, casi raspando mis rodillas y mi primo con su grupo quitó la mochila para dar vuelta los cuadernos, intente que se detuvieran cuando empezaron a pisar las hojas y trate de proteger los cuadernos llorando con desesperación cuando no podía y era empujado