Deseo de amar ©✓

Parte 1

Mi mundo gira en torno a mi vida cotidiana.Tengo 36 años y trabajo de contable hace 10 años en un centro comercial de la Habana.

Me gusta mucho mi trabajo, sobre todo porque trabajar con público me obliga a estar siempre arreglada aunque a veces no lo quisiera, pero no puedo dejar de hacerme la manicura ni un fin de semana y por supuesto mi pelo siempre va muy bien arreglado, de color negro y me llega por la cintura.

En mi puesto es casi necesario estar varias horas de pie, por lo que me pongo zapatos con tacones pequeños para que mis piernas no sufran mucho, pues trabajo 11 horas diarias, excepto los fines de semana.

Mi relación con mis compañeros de trabajo es muy buena, gracias a mi sentido del humor ya que llevamos mucho tiempo trabajando juntos, pero con el que más me ha costado relacionarme es con mi nuevo jefe, Andrew, que tiene 3 años menos que yo.

Es un hombre muy guapo, alto y con el pelo negro pero raras veces sonríe, al parecer por la preocupación de llevar él sólo la responsabilidad de administrar una tienda tan grande desde hace apenas un año.

Casi siempre me regreso a casa en el carro de Michel, el novio de Brenda mi amiga y compañera de trabajo, pues ella está en el puesto de la comida, justo al costado del mío que es el de las ropas y zapatos.

Ellos me dejan en la esquina de mi casa y así me ahorro mucho tiempo de tener que esperar las guaguas.

Hacen una pareja muy bonita y me gusta mucho salir con ellos cuando me invitan algunos sábados por la noche a comer o a una disco a bailar un rato, la verdad es que me hace muy feliz cuando eso pasa porque vivo sola y me aburro mucho.

Mis amigas todas están casadas y con hijos, sin embargo yo lo más cercano que estuve a eso fue que salí por 3 años y medio con Julio, al final lo dejé porque me traicionó en varias ocasiones con la madre de su hijo mayor de 6 años, y yo como una tonta no me daba cuenta del asunto.

Esa ha sido mi relación más duradera y a mi edad, los hombres solteros lo que desean es casarse y poder formar una familia, cosa que la naturaleza ha echo imposible conmigo, pues soy estéril, nunca he quedado embarazada y por lo que parece nunca lo estaré.

Hace más de 15 años que me hago pruebas y siempre los doctores me dicen que soy 98% estéril, que mis óvulos están vacíos completamente y que nunca podré ser mamá, pero yo de tonta después de llorar varias horas me impulso a creer en ese 2% que me queda de consuelo, a pesar de que sé que es imposible.

Es lunes a las 7 am y me levanto para ir a trabajar. Me voy al baño a ducharme y después elijo las medias pantis que voy a usar hoy debajo del uniforme, las rosadas de encaje, esas me las regaló mi madre el día de mi cumpleaños, y es que lleva 5 años seguidos que sólo me regala un par de medias, creo que ella piensa que el trabajo es lo único interesante en mi vida.

Termino de vestirme, me peino, cojo el bolso y bajo las escaleras antes de que Michel tenga que tocar el pito del carro.

—Buenos días. —les digo y les doy un beso a cada uno.

—Buenas Mari, ¿cómo estás con la noticia del jueves? —dice Brenda.

—¿Qué pasa con el jueves? Te juro que no sé nada.

—Ohhh nena perdón por no decirte antes, pero el jueves tenemos un fiestón por el trabajo, nos va a recoger una guagua a las 12 pm porque a las 2 tenemos un concierto de Leoni Torres en La Ciudad Deportiva y, nosotros estamos invitados por la gente de la Central de Trabajadores. —dice Brenda

—Guao, me sorprendió eso, no pasa muy a menudo en nuestro trabajo, jajaja, vamos a ver si estoy de ánimos.—digo yo sin mucho entusiasmo de ir.