Ya han pasado unos meses desde que salimos, el va a mi casa con regulatidad y solemos jugar uno que otro videojuego, el me ha besado y abrazado pero por alguna razon he comenzado a sentirme vacía, es como si el fuera algo distante para mi.
Una mañana estaba desayunando con el, dormíamos juntos pero no teníamos relaciones ni nada relacionado. Tocaron la puerta y yo fui, cuando abri la puerta vi al que seria mi vecino(?)
El chico era de tez apiñonada, su cabello negro y largo, usaba lentes y estaba vestido muy raro era como si estuviera con esa ropa dias enteros.
-A... Azucar..-
Decia con una voz aterradora, era demaciado raro asi que fui por la azucar y se la di para cerrarle la puerta en la cara.
-quien era?.-
Salio de la nada el wero lindo y yo aun espantada respondí.
-al parecer nuestro nuevo vecino.-
El se acerco a mi y me abrazo de la cintura, joder estaba tan nerviosa... Era como tener a un modelo súper sensual enfrente mio!!! Cerré los ojos con fuerza y puse mis manos en mi rostro para no verlo a el y su sensualidad.
-nuestro nuevo vecino eh?.-
Lo dijo susurrando en mi oído, sentia cosa cuando hacían eso mis pocas amigas y el.
-eso significa que esta ya es mi casa?.-
Quite las manos de mi rostro y lo mire hecha un ladrillo, el estaba sonriendo, era un maldito en estas cuestiones... Siempre sabia que decir para ponerme roja y para que mi corazón se acelerara.
-No te creas la gran cosa... Tonto.-
Dije abrazándolo, el solo reía ligeramente, estábamos a punto de besarnos cuando volvió a sonar el timbre, ambos abrimos y no podía creer lo que estaba viendo... De nuevo
